Factores diversos que no viene al caso analizar hoy, hacen que personas sin la capacidad suficiente estén al frente de importantes responsabilidades en organizaciones de todo tipo. Las cosas siguen funcionando, pero todo podría ir muchísimo mejor si en estas responsabilidades fuésemos capaces de tener a las personas con más talento.

Por lo general, si al frente de una empresa o una organización hay una persona mediocre, se termina centrifugando el talento. Es ley de vida. Pero lo malo no es que se centrifugue el talento de Vitoria-Gasteiz a Zamudio o de Donosti a Elciego. No. El problema es que el talento – especialmente el joven se nos va del país, porque aquí no tiene las oportunidades que busca o las opciones de desarrollo profesional que cree merecer.

 

Euskadi está por encima de la media española en los seis pilares que se tienen en cuenta para construir este mapa, pero nuestra principal debilidad es la retención del talento

 

El problema no es exclusivamente vasco, por supuesto. Hace un par de años el Gobierno presentó el “Plan Retorno a España”, aunque por circunstancias obvias, no se ha oído hablar demasiado del mismo. Y en un informe publicado recientemente por TACTIO, al igual que ocurría antes de la pandemia, queda reflejado que la dificultad para contratar es una de las principales preocupaciones de las pymes del país.

Pero aunque el reto sea más amplio, desde Euskadi podemos y debemos actuar con mayor ahínco en esta materia, habida cuenta del paulatino envejecimiento de la población y de la precariedad de nuestro mercado laboral, como ayer mismo resaltaban todas las instituciones en Bizkaia. COTEC, en su Mapa del Talento Autonómico, nos marcó el camino hace apenas unas semanas: Euskadi está por encima de la media española en los seis pilares que se tienen en cuenta para construir este mapa, pero nuestra principal debilidad es la retención del talento.

 

Por lo general, si al frente de una empresa o una organización hay una persona mediocre, se termina centrifugando el talento. Es ley de vida

 

Parece claro que debemos actuar. Y aunque siempre se puede hacer más desde lo público, no apunto hoy a nuestras instituciones. ¿Estamos haciendo todo lo que podemos en nuestras empresas y organizaciones para retener el que tenemos y atraer nuevo talento? ¿Qué ofrecemos para resultar atractivos a las personas que queremos retener y atraer? ¿Qué imagen proyectamos? ¿Qué mensajes les transmitimos?

En la pyme es donde trabaja más del 60% de las personas empleadas, tanto en España como en Euskadi. Sin embargo, es difícl encontrar a una pyme en los rankings de las mejores empresas para trabajar en nuestro país.

 

Obviamente, la pyme no puede competir con las grandes empresas en salarios. Pero sí puede aprovechar su gran ventaja, la agilidad

 

Precísamente buscando referencias inspiradoras para una charla, me dí de bruces con esta pregunta: “¿Te gustaría que tu vida no fuese como esperar a que llegue el fin de semana?”. Es la presentación que hace una empresa llamada Laboratorios Quinton, una de esas pymes que se hace un hueco en los rankings que monopolizan las grandes porque lo de poner en el centro a las personas no parece ser pura retórica. De hecho, allí tus críos pueden acompañarte y pasar contigo la jornada en la oficina en días señalados, libras en tu cumpleaños, existen unos márgenes de flexibilidad horaria interesantes y cuentas con fisio, coach, nutricionista y hasta un medidor de felicidad. ¡Como para no retener y atraer talento!

Obviamente, la pyme no puede competir con las grandes empresas en salarios. Pero sí puede aprovechar su gran ventaja, la agilidad. Agilidad para innovar y tomar la delantera en una de las cuestiones que siempre ha sido clave para el futuro. Porque hoy en muchas ocasiones ya no es el pez grande el que se come al pequeño, sino que es el pez ágil el que se come al lento.