Política

La gestión en la Diputación pasa factura a la candidatura de Rementeria a la Lehendakaritza

La figura política del diputado general se erosiona tras seis años al frente de la institución territorial con casos sonados como el de la Torre Bizkaia y el Nagusi Intelligence Center

21 febrero, 2021 05:00

En abril de 2015 el lehendakari Iñigo Urkullu hace un retrato humano en un vídeo del PNV del por entonces candidato a diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria (Mundaka, 1973). Urkullu desvela que seguía su "pista" desde que militaba en EGI, las juventudes del partido. El lehendakari destaca la "sinceridad y sencillez" del candidato y dibuja un perfil donde sobresalen los "valores" y "principios" inquebrantables del candidato durante su actuación política. "Lo único que ha cambiado en él, y eso es un valor, es la experiencia acumulada", destacaba Urkullu. Tres meses después Rementeria fue nombrado diputado general de Bizkaia tras ganar el PNV las elecciones.

Desde que el ex alcalde de Mundaka accedió al cargo de diputado general en 2015, muchos lo han visto como el relevo natural de Urkullu al frente de la Lehendakaritza. Persona sencilla, amable y sincera en el trato personal, según quienes lo conocen de cerca, su candidatura parece perder fuelle tras seis años al frente de la Diputación vizcaína. "Es difícil no salir con magulladuras, ocho años como estará de diputado general desgastan mucho porque siempre te dejarán una mancha en el expediente allá donde vayas después", señalan fuentes que trabajan en política, que recuerdan que Urkullu tenía un pasado inmaculado cuando fue seleccionado para el cargo tras presidir el PNV. "Rementeria es siempre amable en el trato personal, pero en su papel político al frente de la Diputación le cuesta no meterse en jardines sin necesidad; a veces se pone en plan José Luis Bilbao", señalan fuentes que lo conocen personalmente haciendo referencia a su antecesor, que siempre tuvo fama de altivez.

Es difícil no salir con magulladuras tras ocho años al frente de la Diputación, siempre te dejarán una mancha en el expediente allá donde vayas después

En el EBB del PNV hace tiempo que tienen "serias dudas" de que Rementeria pueda ser la persona que releve a Urkullu, según fuentes próximas al partido de Sabin Etxea. "Si se siguiera una lógica territorial, la persona candidata tendría que ser guipuzcoana", explican estas mismas fuentes, que recuerdan que tras Garaikoetxea (Pamplona, 1938), Ardanza (Elorrio, 1941), Ibarretxe (Llodio, 1957) y Urkullu (Alonsotegi, 1961), el turno debiera ser para una persona de Gipuzkoa, "y a poder ser mujer". Y es aquí donde encaja la figura de la consejera Arantxa Tapia (Astigarraga, 1963). El PNV todavía tiene tiempo por delante para seleccionar a la persona que releve a Iñigo Urkullu al frente de la Lehendakaritza en caso de que gane las próximas elecciones autonómicas, previstas para 2024. Los sectores vizcaíno y guipuzcoano del partido deberán ponerse de acuerdo. Pero el calendario -las municipales y forales serán un año antes, en 2023- y la gestión al frente de la Diputación de Bizkaia está pasando factura a una hipotética candidatura de Rementeria. Sobre todo en los últimos años.

De la torre Bizkaia al NIC

Su gestión de la Torre Bizkaia, el centro internacional de emprendimiento que se ubicará en la antigua torre del BBVA en Bilbao, ha dejado huella en su expediente político y no ha gustado en su partido, según fuentes próximas a Sabin Etxea. Hubo errores en el proceso de adjudicación del centro, que quedó desierto en su primera convocatoria, y finalmente ha quedado en manos de Price Waterhouse Coopers (PwC), sin experiencia en el campo del emprendimiento, y con un viejo conocido del PNV, Asier Atutxa, como socio responsable de la zona Norte de esta consultoría 'Big Four', que tendrá que trabajar conjuntamente con una empresa italiana que será la que aporte el conocimiento en el ámbito del coworking.

Tampoco parece haber sentado bien en algunos sectores del PNV la reciente decisión de Rementeria de instalar, al menos en una primera fase, el Nagusi Intelligence Center (NIC) en la localidad de Urduliz cuando el Ayuntamiento de Bilbao le había reservado ya un solar en la isla de Zorrozaurre, el área de mayor proyección urbana de la capital vizcaína, que pretende convertirse en un polo de investigación y conocimiento. El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, de su mismo partido y siempre prudente en las declaraciones públicas, criticó sutilmente en el diario 'El Correo' las formas en las que se había gestionado el traslado: "Creo que todo esto se podría haber hecho de otra manera", opinó.

Esta misma semana, Unai Rementeria ha vuelto a marcar perfil propio, al estilo de su antecesor José Luis Bilbao, en el debate fiscal sobre la Ley de Aportaciones advirtiendo desde las Juntas Generales de Bizkaia que puede haber un problema si se pretende dar por sentado que el territorio vizcaíno siga siendo el territorio que más aporta. Un mensaje del dirigente del PNV con cierta carga política interna para advertir de que se deben atender criterios objetivos si se quiere que el territorio vizcaíno sea el que más aporte. Se trata de un discurso que recuerda las viejas reivindicaciones vizcaínas y que enarboló con fuerza José Luis Bilbao, quien fuera Diputado general de Bizkaia en la última renovación de esta ley.