Sociedad

Los biólogos vascos piden la regulación de su puesto como 'sanitario' en los hospitales

La decana del Colegio de Biólogos de Euskadi señala que es "absolutamente incomprensible" que no se reconozca el perfil sanitario de profesionales que trabajan con "muestras humanas y pacientes" en campos como la lucha contra el coronavirus

21 agosto, 2021 05:00

Los biólogos han sido uno de los sectores dentro de la sanidad que han estado, y lo siguen haciendo, en primera línea desde el comienzo de la pandemia. Las tareas de realización de pruebas diagnósticas o la labor de los equipos de investigación se han llevado a cabo por estos especialistas, entre otros, que sienten no ser reconocidos como profesionales de la salud y piden la regulación del oficio como profesión sanitaria. Por eso, desde la nueva junta del Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi se han propuesto como principal objetivo aumentar la visibilidad de la profesión de la biología en la sociedad y dignificar la profesión. 

“El biólogo trabaja de forma invisible. En la pandemia ha jugado un papel más que importante. Por ejemplo, en los Institutos de Investigación BioCruces y BioDonosti se han llevado a cabo numerosos proyectos de investigación sobre la COVID-19 en donde los biólogos han estado presentes. Y como en ellos, hay muchas otras entidades donde un número muy elevado de biólogos están trabajando en proyectos similares”, manifiesta Isabel Tejada, nueva Decana del Colegio y Responsable del Área de Sanidad y Salud. 

El problema se centra en aquellas áreas que no tiene especialidad reconocida como la genética, el campo de la reproducción asistida y la investigación sanitaria. Según una ley aprobada en 2003, todo aquel biólogo que no es especialista no es sanitario. Sólo se les considera a aquellos que al inicio de siglo fueron reconocidos en ciertas especialidades multidisciplinares. Para Tejada “Esto es tremendo. Todos aquellos que trabajan en hospitales con muestras humanas, o con pacientes, entre otras cosas, no se les reconoce. Es absolutamente incomprensible”. 

Después de 18 años la reivindicación por regular legalmente la figura del biólogo sanitario sigue en pie. El campo de la genética fue reconocida en el año 2014, pero dos años más tarde fue anulada. Esta herramienta de la medicina que permite realizar diagnósticos más precoces y precisos, prevenir nuevos casos y diseñar tratamientos más efectivos y seguros, está reconocida oficialmente en toda la Unión Europea salvo en el estado español. Por su parte, la reproducción asistida nunca ha sido reconocida y los profesionales del sector prevén que nunca lo será, de igual modo que la investigación sanitaria.  Sin embargo, estos especialistas consideran que las áreas tienen suficiente disciplina como para tener un programa formativo. “Que en el año 2021 se siga pensando que la medicina es solo para médicos es una vergüenza”, expone la genetista Cristina González.   

Esta situación supone una precariedad laboral para el sector que en numerosas ocasiones ejerce la profesión a través de becas enlazadas o proyectos subvencionados. Aunque en ocasiones se han llegado a promocionar puestos estables, la realidad es que todavía no han llegado. “No se crean plazas fijas y es aquí cuando llega el biólogo precario indefinido. Es una situación realmente preocupante”, declara Tejada. 

Euskadi sin plazas de biólogos residentes en hospitales

En año 2019, el anterior ministro incorporó al sector dentro de sus presupuestos. Sin embargo, desde el nombramiento de Carolina Darias como Ministra de Sanidad, la comunicación con los biólogos ha sido completamente opuesta. “No hemos podido entender nada de porqué este cambio tan brutal”, expresa frustrada la decana del Colegio de Biólogos de Euskadi. Para dar voz a la situación se están llevando grandes campañas por las redes sociales. Algunas especialistas como Belen Gil se suman a la reivindicación exigiendo este reconocimiento de su trabajo en la sanidad con resultados en salud. Y aunque la acogida está siendo buena,  el malestar seguirá estando presente hasta que no logren dar un paso más allá en esta lucha. 

Además, el Ministerio de Sanidad ha reducido el número de plazas BIR (Biólogo Interno Residente) un 8% respecto al curso anterior en la última oferta de plazas de Formación Sanitaria Especializada (FSE). Se han ofertado solamente 46 plazas BIR para toda España, de las 10.634 del total. En el reparto, Euskadi se ha quedado sin ninguna plaza. “La sociedad no se da cuenta del trabajo que hay detrás de los hospitales o de cada medicamento. Nuestra labor es imprescindible, y la situación actual nos lo ha demostrado más que nunca”, declara Lucía Matínez, estudiante BIR.