Denuncian que un túnel del TAV cruza la cueva protegida de Lezetxiki, en la zona de Arrasate

Un grupo de aficionados a la espeleología ha denunciado este miércoles que uno de los túneles de tren de alta velocidad se ha realizado en el interior de una galería de la cueva de Lezetxiki, situada en Arrasate (Gipuzkoa), cuyo yacimiento fue declarado el año pasado por el Gobierno Vasco Bien Cultural de Protección Especial con la categoría de Zona Arqueológica.

No obstante, fuentes de la investigación arqueológica de este yacimiento han precisado a EFE que, a expensas de una visita de control de la situación, las obras sólo han afectado a partes de la galería de Leibar, pero no al perímetro de "mayor potencial" de Lezetxiki.

El citado grupo, integrado por aficionados a la espeleología de Arrasate y alrededores, que se denomina Lezetxiki Lagunak, ha hecho público este miércoles un comunicado, que acompaña con fotos en las que se aprecia la cubierta exterior de un túnel a través de las oquedades del interior de una cueva.

Un túnel del TAV en el interior de una galería de la cueva de Lezetxiki / EFE

Una vía tapada por los desprendimientos

Explican que hace dos años comprobaron que una vía habitual dentro de la cueva de Lezetxiki estaba cortada y que el camino de las galerías del fondo estaba completamente cubierto por grandes piedras recién caídas, lo que atribuyeron a un desprendimiento causado por las explosiones y vibraciones de las obras del TAV.

En enero de este año, añaden, supieron que había otro camino para llegar a esas galerías interiores y hace una semana intentaron acceder. Detallan que, por encima del paso interrumpido y del resto de caminos, discurre otro desconocido con un salto de unos 15 metros que se une al itinerario habitual que se encuentra por debajo.

Los miembros de este grupo lograron finalmente llegar al salto y, después de iluminar la cueva, descubrieron "incrédulos" una gran piedra caliza y un desprendimiento que cubría por completo la galería inferior, y 40 metros más allá comprobaron que la causa del desprendimiento era una estructura formada por mallas metálicas y chapas, que resultó ser la cobertura exterior de un túnel del TAV, según destacan en su nota.

El 28 de enero regresaron a la cueva con material que les garantizaba una mayor seguridad para fotografiar "el horror cometido".

Un miembro de Lezetxikiren Lagunak junto al túnel del TAV en la cueva de Lezentxiki

"El enésimo desastre" de las obras del TAV

Destacan que ellos sólo han visto esos daños, pero no tienen "ninguna duda" de que serán mayores aunque no estén a la vista, por lo que denuncian "el enésimo desastre" de las obras del tren de alta velocidad, en este caso en "un importante patrimonio arqueológico" de Arrasate, donde se ha hallado "el resto óseo humano más antiguo del registro paleoantropológico vasco".

Se trata, en concreto, del húmero de una mujer adscribible a Homo Heidelbergensis, con una datación que le otorga una antigüedad mínima de unos 164.000 años, además de dos piezas dentarias adscribibles muy probablemente a neandertales.

El colectivo contrario al TAV, AHT Gelditu, ha difundido otra nota, en la que aseguran que "la destrucción tiene nombres y apellidos" y cita a "los del lobby de la construcción, la clase política que lo sustenta y la banca que la financia".

"En nombre del progreso y de la modernidad no solo están masacrando nuestro pasado, sino también nuestro futuro. Todavía estamos a tiempo de parar la barbarie ¡Movilicémonos!", dice este colectivo.

La Diputación lo niega

El departamento de Cultura de la Diputación de Gipuzkoa ha negado que se hayan producido "destrozos" en el yacimiento arqueológico de Lezetxiki, situado en Arrasate (Gipuzkoa), a causa de las obras del tren de alta velocidad y ha asegurado que el lugar por el que discurre uno de los túneles de está infraestructura se encuentra en el extremo opuesto de la cueva.