Matrici sigue peleando por evitar bajar la persiana en un contexto muy delicado para la automoción y más concretamente para la troquelería. Tras entrar en concurso en verano con más de 20 millones de euros de deuda el plan elaborado por la administración concursal ha permitido a la cooperativa que dirige Juan Fernández mantener la actividad y presentar un convenio para convencer a los acreedores de seguir adelante.
Las dificultades siguen ahí, principalmente porque el mercado no termina de dar el oxígeno necesario a nivel de pedidos y la situación concursal no ayuda, pero la histórica cooperativa vizcaína va quemando etapas camino de la salvación. El fabricante de troqueles del grupo Mondragón podría abandonar el concurso, si todo va bien, este próximo verano. Necesita para ello la confianza de los acreedores y, sobre todo, la explosión de nuevos modelos de los grandes fabricantes europeos.