La multinacional Gestamp reduce su beneficio un 34% hasta junio con algo más de 100 millones de euros de resultado en seis meses en un contexto de reducción global del mercado de vehículos. La firma que encabeza Francisco Riberas logra en el apartado positivo reactivar las plantas del mercado norteamericano, el gran objetivo del plan Phoenix de la compañía, aunque en el total las ventas retroceden ligeramente.

Gestamp se aproximó a los 300 millones de euros de beneficio el pasado ejercicio (281 millones) pero este curso todo apunta a que se escapa un nuevo récord a pesar de esa recuperación de rentabilidad en EEUU y México. La multinacional con sede en Abadiño acusa así la incertidumbre global que vive el sector mientras continúa en la transición hacia los nuevos modelos eléctricos.