En esta semana tan 'peneuvera' con el más que posible nombramiento de Aitor Esteban como nuevo presidente del PNV, uno no puede evitar echar la vista atrás para observar la magnitud del partido jeltzale en Euskadi. Tanto es así que el primer lehendakari, José Antonio Aguirre, fue la cara visible del territorio vasco durante más de 30 años y, además de ejercer como político, también destacó como empresario y dejó pinceladas en el mundo del deporte.
Su trayectoria habla por sí sola: además de pasar a la historia por ser el primer lehendakari, fue alcalde de Getxo (durante dos meses), Consejero de Defensa del Gobierno vasco y Diputado en las Cortes por Bizkaia y por Navarra. Licenciado en Derecho, Aguirre ocupó varios cargos políticos posteriores a su paso por el fútbol, como jugador del Athletic Club.
Además de ser el primer lehendakari, fue alcalde de Getxo, Consejero de Defensa del Gobierno vasco y Diputado en las Cortes por Bizkaia
En los años 20, con una leyenda como Míster Petland a los mandos, hubo tres Aguirres diferentes. Uno era Aguirrezabala o Chirri II, otro era Aguirre el de Begoña y, por último, Aguirre 'Chocolate'. Éste último fue José Antonio Aguirre, apodado así por el oficio de su familia, fabricantes de chocolate. Lo cierto es que la carrera futbolística del lehendakari fue breve.
Aguirre, durante su etapa como futbolista del Athletic Club.
Ganador de dos Copa del Rey
Entre 1921 y 1925, el jeltzale disputó 43 encuentros vistiendo de rojiblanco, de los cuales 11 fueron oficiales (siete de Campeonatos Regionales y cuatro de Copa) y en los que marcó cinco goles, mientras que en los 32 amistosos restantes acumuló otros 12 tantos. Conquistó, en 1921 y 1923, dos Copas del Rey. Casualmente, este 2025 se cumplen 100 años de su último encuentro.
Aguirre disputó 43 encuentros con el Athletic, de los cuales 11 fueron oficiales (siete de Campeonatos Regionales y cuatro de Copa) y en los que marcó cinco goles
Puede que no llegara a despuntar como atacante, pero sí lo hizo político y como empresario. De hecho, Aguirre decidió continuar con el negocio de su familia. Su abuelo, natural de Antzuola (Gipuzkoa), tuvo un obrador de chocolate en Bergara, pero decidió llevar el negocio a Bilbao, a la calle Artekale. Era el año 1881. En aquella época, una decena de artesanos atendían una gran demanda de público acostumbrados a desayunar y merendar chocolate a la taza.
Aguirre, junto al resto de la plantilla del Athletic Club.
El sector chocolatero comenzó a industrializarse de la mano de empresarios innovadores. Los Aguirre emprendieron la construcción de una moderna fábrica en la travesía Tiboli y comenzaron a producir a gran escala, teniendo así despacho propio en Bilbao, Bergara y Madrid.
Chobil, la marca que dejó huella en Bilbao
A raíz de la gran demanda del chocolate, cuatro fabricantes de Bilbao decidieron dar un paso más y se llevó a cabo la sociedad anónima Chocolates Bilbaínos en 1920, montada por La Dulzura, Caracas, Martina Zuricalday y Chocolates de Aguirre. Cada uno poseía el 25% de participación en el negocio. Chobil, como se le conocía al mítico chocolate del envoltorio rojiblanco que se vendía, tuvo tanto éxito que llegó a ser el segundo más importante del sector en España.
Chocolates Bilbaínos fue montada por La Dulzura, Caracas, Martina Zuricalday y Chocolates de Aguirre y cada uno poseía el 25% de participación en el negocio
Ahí es cuando entra en escena José Antonio Aguirre, que colabora extraoficialmente en la empresa familiar hasta los 21 años (por aquel entonces esa era la mayoría de edad) y más adelante como consejero y gerente. Bien es cierto que su labor como abogado y después la política le apartaron del trabajo cotidiano, labores que finalmente acabarían en manos de su hermano, Juan Mari.
La marca de chocolate que tenía la familia Aguirre.
Clave en mejorar las condiciones laborales
Eso sí, antes de dejar de lado el oficio, a Aguirre le dio tiempo a preparar en 1932 parte del 'Reglamento de las bases de trabajo de la Sociedad Anónima Chocolates Bilbaínos', un documento que promovió reformas destinadas a mejorar las condiciones de los obreros, como la asistencia médica gratuita, seguros por accidentes, enfermedad y jubilación, bajas por maternidad o vacaciones remuneradas.
Un reglamento que fue aprobado en el consejo de administración con acuerdo de los trabajadores y que dio entrada a un avance laboral relevante en Euskadi. Un centenar de años después, el lehendakari 'chocolatero' que jugó en el Athletic Club continúa y continuará siendo alguien histórico en la historia del territorio vasco.
Aguirre, durante un mitin como lehendakari.