El acuerdo alcanzado entre patronal y sindicatos permitirán prolongar los ERTE hasta el 31 de mayo. Se trata de un paso adelante para mantener una herramienta que se ha demostrado clave para sostener proteger el empleo, al menos en el primer embate de la crisis. Así, según explicó el consejero de Hacienda y Economía del Gobierno vasco, Pedro Aspiazu, en el análisis de los datos económicos del pasado año, esta herramienta evitó, al menos, a 53.600 personas quedarse en el paro.
El descenso del 9,5% del PIB en 2020, anunciado por el Gobierno vasco, supondría, traducido en jornadas laborales, el equivalente a 79.300 personas. Por lo tanto, sin el paracaídas del ERTE, el parón económico provocado hasta ahora por el coronavirus, se hubiera llegado por delante esos más de 79.000 empleos. En cambio, los datos de destrucción de puestos de trabajo en 2020, a efectos de Población en Relación con la Actividad (PRA) , fueron de 25.700 puestos de trabajo. De ahí, que, como explicó Azpiazu, esta herramienta haya savaldo a más de 53.000 personas de quedarse en el paro.
Los ERTE en Euskadi alcanzaron su techo histórico en el mes de mayo, con más de 130.000 personas afectadas. Una cifra que se ha ido reduciendo hasta quedarse en los 38.000 trabajadores que cerraron el año 2020 trabajando en una empresa que había tramitado un expediente de este tipo. Si bien es cierto, que algunos de ellos estaban activados al 100% de su jornada laboral.
En cualquier caso, el sector servicios, turismo, hostelería y comercio ha sido el más castigado. Además, el saldo del empleo en 2020, a pesar de los ERTE, no ha sido bueno y, según el Servicio de Estatal de Empleo (SEPE), el número de parados creció en más de 18.000 personas durante el pasado año. Para este 2021, el Gobierno vasco prevé crear 15.000 empleos, aunque desde la patronal vasca, Confebask, se estima que la creación de empleo será neutra y se centrará en la incorporación de los trabajadores que actualmente están en ERTE a la actividad.
Acuerdo con prohibición de despidos
La patronal, CEOE, ha confirmado su apoyo a la prórroga de los ERTE, a pesar de que se mantendrá la prohibición de despedir durante seis meses para aquellas empresas que se han acogido a esta ayuda. Y es que el Ministerio de Trabajo ha mantenido una posición inamovibles en este punto, sin dar ninguna opción a modificar este punto que se había convertido en el principal escollo para el acuerdo. Los empresarios valoran positivamente, en cambio, que la prolongación de esta herramienta se lleve más allá de la duración del estado de alarma, llegando hasta el 31 de mayo y que se hayan simplificado los trámites para pasar de una modalidad de Erte a otra.
Los Erte mantendrán las condiciones de exoneración para las empresas que se había fijado desde la última prórroga aprobada en septiembre y, también, las mismas modalidades para su aplicación.
Mismas modalidades de ERTE y mismas exoneraciones
Las condiciones de la prórroga siguen manteniendo las modalidades de Erte. Los de fuerza mayor, dirigidos a las empresas con la actividad más afectada por la pandemia (fundamentalmente turismo y transporte), que permiten a las empresas exoneraciones en la cuota de la seguridad social a pagar del 85% para empresas de menos de 50 trabajadores y del 75% para empresa las que tengan a más personas en plantilla. Se mantiene también el ERTE de impedimento y el de limitación, a los que podrá acogerse cualquier empresa afectada por las medidas de restricción, independientemente del sector en que se encuadre. Estas modalidades permitirán exoneraciones en los pagos a la Seguridad Social del 100% para empresas de menos de 50 trabajadores y del 90% para el resto.
Desde los sindicatos, el apoyo también se da por descontado. Los secretarios generales de CCOO y de UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, han manifestado su apoyo, a falta de unos "flecos", a la última propuesta del Gobierno. "Es muy importante que podamos renovar el acuerdo sobre los ERTE, aunque estamos pendientes de algunos flecos" sobre la propuesta que les remitió anoche el Ministerio de Trabajo, ha dicho Sordo, "una cuestión de concreción de última hora que esperamos que resuelva". "En las próximas horas, con toda seguridad, vamos a tener cerrado" el acuerdo, ha apuntado Álvarez, quien ha añadido que en la última propuesta hay algún cambio, no sustancial, "y lo estamos analizando", para que "los decretos, jurídicamente, sean impecables y no haya que recurrir a interpretaciones".