El flujo del crédito vuelve a restringirse en Euskadi. Y es que, según los datos facilitados ayer por el Banco de España, el País Vasco ha sido la comunidad autónoma de España donde más ha retrocedido el dinero prestado por los bancos a las administraciones públicas y empresas. En total se ha reducido el volumen prestado en 901 millones, dejando el global en 70.155.
Esta evolución en el último trimestre del año supone un retroceso del 1,27% y se añade al del 2,68% registrado en el tercer trimestre. Una tendencia que confirma el cierre del grifo del crédito después de que antes de verano se incrementara un 7,6%, es decir, 5.190 millones de euros que fue la cantidad que prestaron los bancos en Euskadi entre marzo y junio del año pasado.
Durante el pasado año la economía vasca haya recibido un stock de crédito 819 millones superior que el que tenía el año pasado, lo que supone un crecimiento de más del 9% respecto al 2019. Es una cantidad importante y que rompe una dinámica negativa con un alza que no se registraba desde 2016
Pero el dinero prestado no sólo ha crecido en el sector privado. La Administración Pública, mientras veía cómo la recaudación descendía en Euskadi en más de 2.000 millones en 2020, ha tenido que buscar también líneas de financiación. Así, el crédito que los bancos han dado al sector público creció en segundo trimestre un 34,5% sobre el primer trimestre del año. Así, el crédito al sector público vasco asciende, a mitad de este año, a más de 9.803 millones de euros.