El Gobierno vasco y las Haciendas forales llevarán a la próxima Comisión Mixta del Concierto la concertación de la denominada 'Tasa Tobin', que entró en vigor en el mes de enero, pero cuya recaudación sigue sin traspasarse al País Vasco cuatro meses después de su puesta en marcha.
Fuentes del Departamento vasco de Economía y Finanzas confían en que se pueda cerrar una reunión de la Comisión Mixta del Concierto para el mes que viene en la que se concerte este impuesto, de forma que la recaudación pase a depender de las Haciendas forales y "se está trabajando" con el Ministerio de Hacienda en esa dirección. Desde el área que dirige la vicepresidenta María Jesús Montero no han querido aventurar, sin embargo, cuándo se producirá la reunión del órgano bilateral y han señalado que "no está concretado cómo se va a realizar la concertación".
A la espera de que se confirme la fecha del encuentro, el Ejecutivo vasco quiere que esta cuestión figure en el orden del día de una reunión que será muy importante ya que, además de la 'tasa Tobin', está previsto tratar la intención del Gobierno vasco de recurrir de nuevo a la deuda en 2022 para organizar sus presupuestos, debido al retraso de la recuperación económica.
La denominada 'tasa Tobin' graba con un 0,20% las adquisiciones de acciones de las empresas que tengan una capitalización en la Bolsa de más de 1.000 millones. En el caso de empresas vascas afecta a un total de ocho de las que cotizan en estos momentos en Bolsa: Iberdrola, BBVA, Siemens Gamesa, Vidrala, CIE Automotive, Gestamp, Euskaltel y Faes Farma. Son la mitad de las empresas vascas cotizadas en el Ibex 35.
Está por determinar cuál es el impacto real para las Haciendas vascas de la recaudación de este impuesto y también conocer hasta qué punto esta tasa retrae la inversión en Bolsa.
Por el momento, aunque está en vigor desde mediados de enero, no se ha producido ninguna liquidación, ya que la Agencia tributaria ha otorgado un mayor margen temporal para "las adaptaciones técnicas y funcionales de los nuevos contribuyentes".
Así para este primer ejercicio de aplicación, 2021, la presentación e ingreso de las autoliquidaciones correspondientes a los cuatro primeros meses no tendrán que presentarse hasta el 10 de junio. A partir de ahí su liquidación será mensual. Será entonces cuando podrán calcularse los ingresos que puedan derivarse de este nuevo impuesto,
Impacto sobre el mercado por determinar
La recaudación del Impuesto sobre las Transacciones Financieras, como se denomina oficalmente -el nombre de Tobin lo toma del premio Nobel de Economía James Tobin que desarrolló el concepto de este impuestos en los años 70 para desincentivar la especulación- la asumen los intermediarios de la compra. Es decir es la empresa de servicios de inversión o la entidad de crédito la que será la pagadora del impuesto en un principio, y después el bróker trasladará al inversor el impacto de ese 0,20%. Está por ver el impacto que tendrá este impuesto en la actividad del mercado.
Desde Norbolsa, una de estas empresas intermediarias, señalan que la entrada en vigor de esta tasa "no ha ayudado" a aumentar la compraventa de acciones aunque reconocen que "ha pasado poco tiempo como para hacer una apreciación" sobre el impacto, según reconoce Isabel Mera, responsable de Ventas Institucionales de Norbolsa.
"Estamos en estos momentos en un mercado con mucha volatilidad", con un "menor volumen de negociación", porque hay "poca inversión institucional", señala.
Sin embargo, cree que, a diferencia de otras mercados en los que la entrada en vigor de un impuesto "puede retraer la inversión", en el entorno bursátil se está acostumbrado a impuestos y tasas, lo que implica que el hecho de que el volumen de negociación sea ahora más bajo del del año pasado, se debe a la situación del mercado y la baja actividad institucional, más que a la entrada en vigor de nuevo impuesto.