La vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, ha asegurado hoy que la promoción de la salud “no sólo es un derecho de las personas trabajadoras, sino una inversión para las empresas”, y ha avanzado la necesidad de repensar el concepto del lugar de trabajo “como un espacio saludable y seguro”.
Mendia ha participado en el Foro Empresa Saludable, una cita organizada por el diario 'El Correo' con la colaboración de Osalan en el museo Guggenheim Bilbao. Tras destacar la “capacidad inmensa” que ha tenido el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales para atender el desafío que ha supuesto la pandemia de la Covid, la Vicelehendakari ha apuntado que “los empleos del futuro inmediato no van a ser como los conocíamos antes, van a ser distintos y necesitan respuestas distintas”.
Por ello, y tras recordar que el departamento que dirige está desplegando “una Estrategia Vasca de Empleo para una década” que, entre sus claves, recoge la garantía de la salud y la inspección que vela por los derechos de las personas trabajadoras, ha insistido en que Osalan se dedica a “prevenir, a facilitar a las empresas y a las y los trabajadores el máximo de garantías mientras ejercen sus profesiones”.
Llamamiento a la corresponsabilidad
La Vicelehendakari se ha referido a la corresponsabilidad en la prevención, que afecta a “ciudadanos, empresarios, agentes sociales, autoridad laboral y a todos los que asumen el lema de que no hay empleo de calidad si el empleo no es seguro”. Por ello, ha apuntado, “esa será la base para la nueva 'Estrategia de Salud Laboral 2021-2025' que estamos ultimando, y que camina hacia un cambio de paradigma”
En este sentido, Mendia ha asegurado que, hasta ahora, la prevención de riesgos laborales se basaba en el puesto de trabajo, “sin tener en cuenta que nuestras diferencias físicas o sociales nos hacen diferentes y nos hacen corre riesgos o enfermedades distintas”.
Por esta razón, la nueva Estrategia pondrá deberes a todo el mundo. “A todos los departamentos del Gobierno vasco para que la seguridad, como ya hemos conseguido con la igualdad, sea troncal en cada acción pública, en cada plan y en cada estrategia”.
Asimismo, se pone deberes la propia Osalan “para proteger mejor a quienes tienen menos herramientas, como son los autónomos, las pymes, o quienes trabajan en sectores tan delicados y tan necesarios como el de ayuda a domicilio y el sociosanitario”. También a las organizaciones preventivas, para que mejoren su coordinación, y a cada persona, “como una responsabilidad ciudadana que asume una cultura preventiva”, ha reiterado.
La vicelehendakari ha adelantado, además, que la Estrategia contemplará como cuestiones relevantes el envejecimiento de la población activa; la integración de la perspectiva de género en la prevención de riesgos laborales; el hecho de que ya estemos en un entorno laboral digital; y los riesgos psicosociales, en particular el estrés laboral, que suponen uno de los problemas de seguridad y salud en el trabajo más complejos y habituales.