El Gobierno y los sindicatos han logrado un acuerdo para subir las cotizaciones sociales de los trabajadores y costear así las futuras pensiones. Un acuerdo del que la patronal se ha desmarcado tras rechazar la subida del salario mínimo de 950 a 965 euros para este año. Finalmente, las cotizaciones subirán 0,6 puntos durante diez años, a partir del año que viene y hasta el 2032. Y el reparto será de 0,5 puntos a cargo de la empresa y 0,1 puntos para el trabajador. Confebask, la patronal vasca, ha mostrado también su rechazo a este acuerdo porque cree que dificultará el empleo.
Aseguran que esta novedad supone un "aumento de las cargas empresariales" y lamentan que se insista en "poner plomo a las alas de la contratación y la recuperación", según han manifestado fuentes de la patronal vasca a Europa Press.
Las mismas fuentes se han referido, de esta manera, al acuerdo cerrado este lunes sobre el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), sustituto del Factor de Sostenibilidad de la reforma del sistema de pensiones de 2013. El MEI eleva el aporte de las cotizaciones sociales a 0,6 puntos porcentuales, que quedarán repartidas en 0,5 para la empresa y un 0,1 para el empleado.
Confebask ha manifestado que suscribe "completamente lo ya dicho" por la CEOE, que ha expresado su rechazo a esa subida de las cotizaciones sociales para engordar la 'hucha' de las pensiones. A juicio de la patronal vasca, el acuerdo supone un "aumento de las cargas empresariales", que va "a perjudicar a su competitividad".
En este sentido, la Confederación Empresarial Vasca ha lamentado que, con este acuerdo, se insista en "poner plomo a las alas de la contratación y la recuperación".