El PNV, que celebra este fin de semana en el BEC de Barakaldo su VIII Asamblea General ha analizado la actual situación tributaria y cómo adecuarla para retener y atraer a las empresas, así como explorar la búsqueda de nuevos ingresos fiscales o, en 'román paladino', nuevos impuestos.
Bajo el título Diagnóstico del Momento para construir el futuro de Euskadi', la Ejecutiva Nacional jeltzale, de la mano de expertos ajenos a la estructura del PNV, han llevado a cabo un texto que recoge, entre otras cuestiones, los desafíos que marcarán el "futuro económico". El documento pone en valor el Concierto Económico, así como "unas crecientes, aunque todavía incompletas, transferencias" que "han facilitado que, desde entonces, se hayan sentado las bases" para la creación de unas condiciones de entorno favorables para "la inversión y el desarrollo económico; la implantación de una sólida estructura"
Nuevas fuentes fiscales
En lo relativo a la "arquitectura fiscal", según informa Europa Press, cree que esta "requiere adaptación a los nuevos contextos globales". "Debemos explotar aún más la soberanía fiscal, desarrollando los incentivos fiscales que favorezcan la reinversión, atraigan nueva inversión y faciliten la creación de empleo de calidad, así como pensar en nuevas fuentes de ingresos fiscales", asegura.
También es partidario de "replantear la arquitectura fiscal actual basada en la tributación de las rentas del trabajo y del capital" para "adaptarla a los nuevos modelos de negocio y al mayor peso específico de la economía digital, buscando singularizarse en el entorno europeo".
El PNV destaca la necesidad de "un modelo de relaciones laborales similar al del Norte de Europa, superando un modelo caduco e ineficiente". "Apostamos por un modelo que promueva la negociación colectiva como vía para el avance sociolaboral y el establecimiento de un marco propio de relaciones laborales vasco, que defienda los intereses y las condiciones laborales de las personas, y participe de la generación de empleo estable y de calidad", añade.
Por otra parte, ve "imprescindible" también "reducir el elevado nivel de precariedad laboral y de absentismo, muy superior al de otras regiones del Estado español y de Europa".
Convencido de que "la clave de bóveda de una economía competitiva es potenciar un modelo educativo de excelencia e inclusivo", en el que "el talento es clave", insta a "cuidarlo y atraer nuevo talento a Euskadi". Además, cree que el sistema educativo tiene que evolucionar "para satisfacer las demandas de formación de empleos que no existen actualmente y que se irán creando sin preaviso".
Retención de empresas
También apuesta por "adaptar y reforzar la estructura económico-empresarial" mediante el fomento de "la creación de un ecosistema favorable a la retención de empresas y a la atracción de nuevas empresas tractoras y PYMEs, que genere un tejido empresarial más potente y diversificado con un modelo de colaboración público-privada ejemplar".
En paralelo, ve necesario "abordar el reto de mantener y potenciar los centros de decisión empresarial en Euskadi" para lo que "habrá que mantener las entidades tractoras históricas", lo que "permitirá sustentar todo el entramado empresarial y de empleo que hay vinculado a ellas".
El arraigo de la "cultura y valores", la "igualdad de género en todos los ámbitos de la vida social y económica" con otros valores que incluye el documento, en el que se afirma que, "sin excluir otras que puedan surgir en los próximos años", existen tres áreas económicas "de gran potencial y futuro en el país hacia las que transitar". "Industria inteligente; energía y medioambiente; sector social y sanitario", cita.
El PNV destaca retos como la transición digital, hacia la industria inteligente, la transición energética y medioambiente, la transición social y sanitaria.
Respecto a las políticas de la Unión Europea en el área de clima y medio ambiente, el texto afirma que Euskadi "ha de situar en todas sus políticas y en todo lo relacionado con el medioambiente unas metas alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y unos indicadores que nos permitan ir mejorando las variables ambientales".
"La industria, el crecimiento económico, la tecnología, la nueva energía y la adaptación al cambio climático serán motores para alcanzar un crecimiento sostenible y justo, que no deje a nadie atrás", recoge.