Hace escasos días, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, abría el melón de las macrogranjas y la ganadería intensiva en España en una entrevista para 'The Guardian' en la que afirmaba que “contaminan el suelo, contaminan el agua y luego exportan carne de mala calidad de animales maltratados”. Estas palabras no han dejado indiferente a nadie y las críticas han ido lloviendo tanto de sectores como la agricultura y la ganadería como desde otros partidos políticos, incluído el PSOE, su socio de Gobierno.
La polémica se trasladaba a Euskadi de la mano del PP y de Elkarrekin Podemos IU. Por un lado, los populares han planteado iniciativas en las instituciones para reprobar la actitud de Garzón por sus palabras y, por otro lado, la coalición a la que pertenece el propio ministro también ha presentado mociones en los ayuntamientos vascos para mostrarle su apoyo y a favor de la agricultura sostenible. Ambas actitudes han sido duramente criticadas por el PNV que ha calificado de "asombroso" y "bochornoso" que estos grupos trasladen a Euskadi la polémica de las macrogranjas cuando estas no existen en el País Vasco.
Es cierto que en Euskadi no hay ninguna granja de estas características, lo más parecido es una explotación porcina intensiva en Zambrana, pero que en ningún caso llega a emitir parámetros de contaminación preocupantes. Donde sí las hay es en Navarra, en Caparroso, donde hay una explotación ganadera que produce leche con 7200 cabezas de ganado y una extensión de algo mas de medio millón de metros cuadrados. Si en Euskadi no las hay es porque la orografía no lo permite y no hay espacio suficiente para instalarlas.
"Son una seria amenaza"
Mientras todo este debate sigue sobre la mesa, sindicatos agrarios vascos alertan del riesgo que estas 'macrogranjas' pueden suponer para los pequeños productores familiares vascos, a pesar de no haber ninguna en Euskadi. Fuentes de UAGA, la Unión Agroganadera de Álava, aseguran que el miedo que sobrevuela sobre ellos es que este modelo de granjas "se lleva la producción nuestra porque no podemos competir contra ellos".
Apuntan además a un caso muy concreto en Soria. Se trata de una macrogranja vacuna en el pueblo de Noviercas con más de 20.000 vacas, una de las más grandes de Europa. Desde UAGA llevan ya más de 3 años señalando a esta instalación como una "seria amenaza" porque aseguran que su producción es "similar a la de toda la cornisa cantábrica junta" y puede provocar que "otras pequeñas desaparezcan". El sector del vacuno de leche en Euskadi atraviesa una situación "bastante preocupante produciendo a pérdidas". Durante los últimos años estas ganaderías han ido mermando y en estos momento en Álava ya hay menos de 40.
Sindicatos agrarios vascos llevan ya mucho tiempo denunciando que el modelo de costes les está ahogando. En el último balance agrario la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), de 2021, alerta de que la subida de los costes de producción, estimando un incremento interanual de 30%, no se ha trasladado al precio de venta de los productos, dando como resultado una fuerte caída de la renta agraria por UTA, que alcanza el 6%. COAG considera que la situación es muy preocupante para las expectativas del 2022 porque pone en riesgo la viabilidad económica de las explotaciones. "Confiamos en la nueva Ley de cadena alimentaria para que la situación se pueda controlar y mejorar, pero se tiene que cumplir", apuntan desde UAGA.
Tapia se reunirá con representantes del sector
A raíz de todo lo ocurrido, la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, mantendrá este jueves en Aia, Gipuzkoa, un encuentro con representantes del sector agro-ganadero vasco en el que se dará a conocer un manifiesto a favor de la agricultura y ganadería familiar existente en Euskadi. Según informa Europa Press, este encuentro se celebra a iniciativa del Gobierno vasco y será con ENBA y EHNE en Gipuzkoa y Bizkaia, UAGA y URKAIKO. Será una reunión para hacer un análisis de la situación de este sector en Euskadi, donse no existen macrogranjas.