Euskomer exige regular las rebajas de nuevo para "no favorecer a los grandes comercios"
La confederación del comercio en Euskadi pide una rebaja fiscal para los pequeños establecimientos y reconoce problemas para encontrar mano de obra
20 junio, 2022 14:00Con las rebajas de verano en el horizonte -apenas quedan once días para que comiencen-, los comercios vascos vuelven a poner pie en pared con los descuentos y piden una regulación que ponga orden a la competencia entre el pequeño comercio y las grandes superficies con el objetivo de que las pequeñas tiendas puedan volver a recuperar un "efecto llamada" que se ha perdido para dar salida a los stocks a final de temporada. Así de rotunda se ha expresado la presidenta de Euskomer, la Confederación Vasca del Comercio, Estíbaliz Tello, durante la rueda de prensa previa a la asamblea ordinaria de la institución, que agrupa a 101 asociaciones y representa hasta a 18.000 establecimientos vascos. Tello ha admitido que no fue "una buena idea liberalizarlas" porque ahora se da un "bombardeo de ofertas de todo tipo" que han vaciado de sentido esa liberalización.
Las rebajas "solo han favorecido a los grandes en detrimento del pequeño comercio" ha sentenciado Tello, que ha pedido volver a unos "periodos de tiempo controlados, con una fecha de inicio y de fin, en los que todos participemos con las mismas reglas de juego". Ahora, con la liberalización de estas ofertas, "las rebajas se han convertido en una etapa más de las ventas, en la que apenas hay ese impulso, esa afluencia de gente, ese deseo de comprar a mejor precio, porque durante todo el año estamos bombardeados con ofertas de todo tipo". "Hay que volver a darle forma", ha afirmado la presidenta de Euskomer.
El sector también está preocupado por la falta de relevo generacional. Un problema que el comercio, al igual que las patronales vascas, también empieza a detectar junto al de la digitalización, un asunto que hay que abordar apostando por la presencia en todos los canales de venta como "garantía a la hora de ser más competitivos", ha afirmado. Sobre este asunto, al igual que lo hizo Zedarriak en su momento, Tello también ha señalado a la fiscalidad, sobre la que ha pedido que se iguale con las grandes firmas del sector para poder "competir en márgenes" con la venta online, con respecto a quienes sienten que sufren "discriminación fiscal". "Todos debemos jugar con las mismas reglas de juego", has subrayado la presidenta de la conferedación vasca del comercio.
Buenas expectativas a pesar de la inflación y de TicketBai
En cuanto al impacto de la inflación, la presidenta de Euskomer ha reconocido que ya se está notando un efecto en las compras y que esos márgenes que necesitan ampliar a través de la fiscalidad también se han visto reducido al no poder repercutir los costes. El descenso de las ventas se está notando de un modo particular en los establecimientos de alimentación según Iñaki Vivanco, de Aenkomer.
El comercio, que supone el 14% del empleo en Euskadi y el 11% del PIB, se debería recuperar a finales de verano y volverá en "corto plazo" a cifras prepandemia según la conferedación del sector. Las expectativas son "mejores" que hace seis meses para Euskomer, que ve desde abril "un punto de inflexión" en positivo que cerró una fase de "dientes de sierra" con subidas y bajadas del comercio que parece haberse cerrado ahora. De ahí las buenas expectativas para el verano.
En cuanto a TicketBai y el laberinto interterritorial que ha supuesto esta herramienta, Tello ha hecho hincapié precisamente en este punto: en la falta de armonización entre territorios, que ha llevado a que este año sea de implementación tanto en Gipuzkoa como en Álava "con dos implementaciones y dos exigencias de sistema de digitalización diferentes". En Gipuzkoa y Álava, ha explicado, las haciendas forales "exigen el control de las ventas, mientras que en Bizkaia en el sistema Batuz se integran, además de las ventas, el control de las compras y gastos, por lo que es más complejo". Cada territorio, han apuntado, "tiene diferencias informáticas, con lo que los provededores tienen que adaptarse a cada provincia con lo cual es un gasto mucho mayor para el comercio y también para las diputaciones".