Con la llegada de la pandemia, el teletrabajo se convertía en la única vía para poder mantener la actividad en multitud de empresas. Con la paulatina vuelta a la normalidad, eran cada vez más las voces que pedían que esta nueva forma trabajar fuera una de la pocas cosas del covid que se quedara dentro de esa llamada 'nueva normalidad'. Hay empresas que sí lo han mantenido ajustado la jornada laboral a nuevas fórmulas como, por ejemplo, tres días de trabajo presencial y dos desde casa, o cuatro y uno, o por turnos semanales... Hasta el propio Gobierno vasco ha planteado esta posibilidad y está estudiando habilitar dos días de teletrabajo semanales para la administración pública. Sin embargo, esa es la realidad de una minoría muy pequeña de vascos.
Concretamente, según un estudio elaborado por Randstad basado en datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), señala que a día de hoy solo el 5,4% de los empleados vascos 'curra' desde casa, unas 50.400 personas. Unos datos que se sitúan por debajo de la media nacial que ronda el 7%. Este estudio compara la situación actual con la de hace un año y con el momento de la pandemia y apunta que hay 450.000 personas teletrabajando menos que en septiembre de 2021 y la mitad que durante el confinamiento domiciliario, cuando más de 3 millones de empleados (16,2 % de los ocupados) trabajaba desde su casa.
En busca de la conciliación
En el caso concreto de Euskadi, el volumen de vascos que trabajan desde sus domicilios se ha reducido un 6% con respecto a hace un año. Esto se traduce en que en los últimos doce meses 3.200 personas han dejado de teletrabajar de manera habitual en el País Vasco. Este informe de Randstad explica que una vivienda adecuada, conciliación y capacidades digitales son algunos de los retos pendientes del teletrabajo que pueden estar influyendo en la caída del porcentaje de profesionales que llevan a cabo su ocupación de manera remota.
Una conclusiones que casan con la realidad de los empleados vascos. De hecho, muchas familias tienen problemas para conciliar su jornada laboral con las responsabilidades del hogar y la familia. Así, el 28,7% de las personas ocupadas residentes en Euskadi afirma tener "muchas dificultades" para compaginar el trabajo con el cuidado de sus hijos menores y el 25,9% asegura tener ese mismo grado de dificultad a la hora de atender a las personas dependientes, según los datos elaborados por Eustat.
Sánchez insta a extender esta modalidad para ahorrar energía
Esta caída tan pronunciada en Euskadi contrasta con la intención expresa de Pedro Sánchez de extenderlo como una posible medida dentro del plan aprobado para ahorrar energía. Este plan de contigencia del Gobierno incluye una recomendación a las empresas para que favorezcan y faciliten el trabajo en remoto ahora en septiembre, con la vuelta de las vacaciones. Donde todavía no ha ganado mucho peso esta cuestión es en las negociaciones de los convenios, aunque sí hay caso importante en Euskadi sobre esta materia como es Euskaltel. La compañía de telecomunicaciones ha acordado dos días de trabajo desde casa, lunes y viernes, además de dar la posibilidad de usar esta modalidad otros seis días más. Otras industrias como Orbea o ITP -en el caso de su personal de oficina- también lo han establecido con modelos híbridos.