El Gobierno vasco ha cerrado con el Ejecutivo de Pedro Sánchez un nivel de déficit del 0,6% para el próximo ejercicio, lo que supone que se dispondrán para gastar casi 500 millones más (493 millones). Así lo ha indicado el departamento de Hacienda y Economía que dirige Pedro Azpiazu, y añade que las diputaciones forales podrán gastar 82 millones más, un desajuste sobre ingresos del 0,1%, con lo que en conjunto las principales administraciones de Euskadi dispondrán de un desvío de gasto de unos 570 millones de euros.
Todas estas cifras deberán ser ratificadas en Comisión Mixta del Concierto Económico, aún sin fecha prevista, ha matizado el gabinete de Azpiazu, que añade que, por otro lado, se contempla en el acuerdo preliminar con Madrid una capacidad de endeudamiento público del Gobierno vasco para 2023 del 13,5%, lo que suponen 11.075 millones de euros.
En 2022, la deuda pública vasca cerrará con 10.860 millones de euros, señala el Gobierno vasco, suponiendo un nivel de endeudamiento del 14% del PIB, aproximadamente. Euskadi es una de las comunidades autónomas menos endeudadas, más de 10 puntos por debajo del porcentaje total de las comunidades sobre el PIB.
El área de Hacienda y Economía señala que las cifras de este acuerdo garantizan en parte el margen necesario para que las instituciones vascas puedan elaborar sus presupuestos del año que viene, en un contexto económico marcado por la guerra en Ucrania y su repercusión negativa en la economía mundial. Será en el Consejo Vasco de Finanzas de mediados de octubre cuando se pueda hacer una primera valoración de previsión de ingresos fiscales de cara a 2023.