A punto de cerrar su cuarto año de existencia y con 110 millones ya levantados, ABE Capital Partners sigue quemando etapas. El fondo impulsado por el Gobierno vasco -y que cuenta ya con un amplio respaldo de socios- ya tiene a sus espaldas cuatro inversiones, pero apunta a cerrar 2022 como el primer año desde 2019 sin ninguna operación a su espalda: cero adquisiciones a 10 de diciembre.
Sin embargo, el fondo está empezando a aportar los primeros ingresos a las arcas públicas. A la espera de que sea el retorno a largo plazo el que ponga en valor la aportación de 24 millones desde el Gobierno vasco y las diputaciones, el vehículo inversor de Javier Arana ha dado ya una primera retribución al Ejecutivo autonómico este año. En concreto, 172.617 euros recibidos por la incorporación de un nuevo gran inversor el pasado mes de mayo segun datos recabados por este periódico.
Fuente de pérdidas
El vehículo inversor, en cualquier caso, sigue siendo, fuera de los 24 millones, una fuente de más pérdidas que beneficios para Lakua, que ha abonado desde la constitución del fondo hasta septiembre un total de 583.896 euros por comisiones de gestión. El Ejecutivo controla el 13,68% del accionariado y es el segundo socio con más porcentaje accionarial.
Por detrás, solo un fondo que controla el 27,3% del total del fondo, seguido de tres accionistas -instituciones financieras- que han comprometido 10 millones de inversión para tener un 9,1% cada uno. El resto de la masa del fondo se reparte entre accionistas minoritarios que conforman el 31,7% restante.
Por el momento la valoración del Gobierno sobre las inversiones del fondo del ex de Alantra es que son "positivas y acordes" a pesar de que este año no se ha realizado ninguna inversión. Las cuatro participadas hasta ahora tocan todos los palos: desde el proveedor de soluciones digitales Plain Concepts hasta el desarrollo de combustibles sostenibles con Oleofat, pasando por los insecticidas de Quimunsa y por los componentes electrónicos de Fanox Electronic.