Los sindicatos han rechazado en rueda prensa las medidas de recorte en el empleo presentadas por Aernnova y que fijan 101 despidos sobre la plantilla de 454 personas en la planta Alavesa de Berantevilla, y han anunciado movilizaciones de protesta. Como alternativa, han reclamado la validez de medidas temporales, como los ERTEs, para hacer frente a la situación. En esa línea, han manifestado que están dispuestos a avanzar. Aernnova ha comunicado esta decisión hoy por la mañana a los trabajadores tras acumular pérdidas por 42 millones de euros y una caída de la actividad en la planta del 33%. Para la empresa, los despidos son "dolorosos", pero la única salida para "garantizar la supervivencia de la actividad".
Para las centrales sindicales, la decisión de la empresa, lejos de ser un recurso para asegurar su supervivencia tras una caída en la cartera de pedidos de más del 40%, es un método “para asegurar los escandalosos beneficios del grupo (290 millones en los últimos 5 años)". En su valoración, los representantes de los trabajadores han anunciado que además de los despidos, las medidas contemplan también un ERTE sobre 305 trabajadores a partir del 1 de febrero.
Insisten en el hecho coyuntural de la crisis y en las perspectivas positivas que ofrece la vacuna. “Es”, señalan, “una muestra de que la crisis no es estructural, y de que la recuperación será rápida”. Por ello, acusan a Aernnova, que lejos de esperar a la recuperación pretendan aplicar medidas estructurales desde ya.
Los trabajadores han apelado también a las instituciones, en concreto al lehendakari Urkullu y a la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, para que “defiendan un sector estratégico para la industria Vasca y dejen de ponerse de perfil, justificando los despidos”.