El índice de confianza que tienen los empresarios vascos respecto a sus expectativas para el primer trimestre de 2021 se sitúa en 31,4 puntos, tan sólo 6 décimas más que en el trimestre anterior, lo que supone que "persiste su visión pesimista" respecto a la evolución de la economía.
Ésta es la conclusión más importante del informe sobre la confianza empresarial que elabora con periodicidad trimestral el Departamento de Estudios de Laboral Kutxa, que recuerda en este último estudio que un valor del índice inferior a 50 significa "estar en zona de contracción o recesión".
El documento considera que las expectativas empresariales para los tres primeros meses del próximo año "siguen mostrando un resultado negativo" porque están "condicionadas" por la crisis sanitaria de la covid-19 en "un momento" como en el actual, "de rebrote" de los contagios, que pone de manifiesto "la interacción entre salud y economía" y apunta hacia "un panorama pleno de incertidumbre y dificultades".
De hecho, el 71 % de las empresas encuestadas considera que la situación del entorno económico "empeorará" respecto al trimestre actual, mientras que el 19,8 % cree que se mantendrá igual y sólo el 9,1 % que mejorará.
Las previsiones de facturas también son "negativas" para los próximos enero, febrero y marzo, indica el informe de Laboral Kutxa, que concreta que el 50,3 % de los empresarios consultados considera que será más baja, el 38,7 % la prevé similar y tan sólo un 11 % cree que mejorará.
Las opiniones sobre la actividad discurre de forma similar, ya que el 55,4 % estima que su actividad empeorará, frene al 8,9 % que confía en que mejorará y el 35,7 % que considera que seguirá igual.
En cuanto a los pedidos, los resultados del informe apuntan a una caída, con casi la mitad de las empresas preguntadas, el 48,8 %, que cree que el volumen de encargos que tendrán disminuirá, el 40,8 % que lo sitúa en niveles similares al último trimestre de 2020 y el 10,4 % que espera que mejore.
Respecto a la evolución de los previos, las expectativas se reparten fundamentalmente entre el 35,7 % que considera que serán más bajos y el 58,9 % que cree que se estabilizarán, con un restante 5,4 % que cree que subirán.
Las expectativas de rentabilidad reflejan igualmente la tónica pesimista general, pues un 47,3 % prevé que sea inferior y sólo el 5,4 % espera obtener rendimientos superiores, quedando en el 52,7 % para quienes esperan alcanzar un nivel similar de rentabilidad a sus negocios.
En cuanto a la inversión, los datos estudiados "ofrecen un panorama negativo" pues al parecer las empresas tienen intención de "retrasar" sus planes inversores "hasta que despeje el horizonte".
Por esa razón, el 43,8 % de las empresas vascas creen que su nivel de inversión disminuirá y sólo el 7,7 % que subirá, con un 48,5 % de las encuestadas que prevé mantenerla