El alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, no modificará la posición del Ayuntamiento alavés en su negativa a los trabajos de prospección en busca de gas en Subijana (Álava). Por lo tanto, la sociedad pública del Gobierno vasco que pretende explorar la existencia de un yacimiento de gas al oeste de Vitoria no verá cambios en la negativa que ha recibido del Ayuntamiento. Y es que, según ha explicado Urtaran en un entrevista en Radio Euskadi, "soy alcalde de Vitoria y me debo en primer lugar al municipio y a cumplir la normativa del Plan General de Ordenación Urbana que prohíbe cualquier actividad extractora en el término municipal". "Esa posición no la cambiaremos", ha señalado. El alcalde ha ido más allá y ha señalado que, para desatascar la situación sólo queda la salida que "ya señala la autorización de impacto medioambiental aprobada por Ministerio de Transición Ecológica, en caso de conflicto con la normativa municipal, que es la de que lo resuelvan los tribunales".
Urtaran ha defendido la estrategia energética del Gobierno vasco y ha señalado que, hasta llegar a una generación de energía centrada 100% en renovables, es necesario dar un con un sistema de transición y en esa opción "sólo nos cabe optar por el gas o la energía nuclear. Yo opto por el gas". En este sentido ha insistido en que siempre será mejor emplear, de modo transitorio, "gas extraído en Euskadi, en Vitoria, que recurrir a gas de Nigeria. Dónde no sabemos en qué condiciones de trabajo para las personas y con qué emisiones se extrae". Además, ha insistido en que la emisión que genera su transporte es también mucho peor desde una perspectiva medioambiental.
La consejera de Desarrollo Económico del Gobierno vasco, Arantza Tapia, y el alcalde de Vitoria han mantenido contactos en los que Gorka Urtaran ha insistido en su posición de respaldo a la estrategia del Ejecutivo, pero en los que ha recordado también que no puede contravenir la normativa municipal, insistiendo en que no cambiarán su posición. Tapia insistió la semana pasada en que el camino no está cerrado y que el proyecto de extracción de gas cuenta con el permiso más importante, la autorización del impacto medioambiental.