Tubacex ha presentado un ERE de 150 trabajadores, lo que supone el despido de casi el 20% de la plantilla de 800 empleados de las instalaciones de Llodio y Amurrio. La compañía ha señalado al comité de empresa que los problemas que vive el sector del petróleo y el gas se hacen estructurales y que no cabe más solución para la supervivencia de la fábrica. Además, para el resto de la plantilla la compañía ha anunciado también que aplicará un ERTE.

Ha sido un final anunciado desde que en el mes de julio Tubacex trasladara a los sindicatos la necesidad de buscar soluciones alternativas como reducciones de sueldo o ajuste de horarios. Desde entonces la situación y las pérdidas, que en el último balance ascendían a 18 millones de euros, se han ido incrementando en un empeoramiento de la situación. 

El expediente para la extinción de 150 empleos comienza su tramitación hoy y se prolongará durante los próximos 30 días. Es una decisión que, según ha explicado la empresa, responde a razones estructurales derivadas de la grave crisis del principal sector al que van destinados sus productos, petróleo y gas. La actividad en dicho sector ha caído más de un 50% desde el año 2015 y no se espera una recuperación a volúmenes anteriores dada la aceleración de la transición energética y la clara apuesta por otras fuentes de energía.

Según explicó Tubacex en diciembre a través de una carta que envió a las instituciones explicando la gravedad de la situación, 2020 generó unas perdidas de 18 millones de euros por la paralización de los proyectos de inversión de sus clientes y con la consiguiente cancelación de pedidos, ha empeorado su situación y las previsiones económicas, ya que buena parte de su actividad es todavía dependiente del sector de petróleo y gas.

ERTE para toda la plantilla

Además de los despidos, la empresa ha anunciado anunciado también el inicio de un ERTE que afectará a la totalidad de la plantilla para paliar las consecuencias que el coronavirus está generando en los clientes de Tubacex y que ha hecho que la cartera de pedidos de la compañía haya descendido "dramáticamente" en los últimos meses. 

Tubacex ha señalado que "lamenta profundamente" verse abocada a tomar estas medidas, pero ha insistido en que ya anunció en el pasado mes de julio que la caída del mercado le obligaba a poner en marcha medidas para reducir los costes en un 20% con el objetivo de mejorar su competitividad y asegurar la sostenibilidad de la compañía. En esta línea, fuentes de la empresa, han lamentado que haya sido imposible tratar de acodar con los sindicatos medidas alternativas como "ajustes salariales o de reducción de jornada".