La multinacional francesa invertirá este año en la fábrica de Vitoria 50 millones de euros para mejorar el proceso de producción de neumáticos tanto de turismo como de obras públicas y minería. Una inversión que va acompañada de una recuperación empujada por las exportaciones y que prevé que la planta de Michelin de la capital vasca presente este año mejores números que lo previsto a finales de 2020, cuando la producción se contrajo algo más del 10%. Se trata de una situación positiva que, como explica para ´Crónica Vasca´ el director de las instalaciones, Mariano Arconada, para los neumáticos de turismo "las previsiones de producción son, hoy en día, algo mejor de lo esperado, confirmando las previsiones de fin de año 2020" y, en el caso del neumático de industrial, "la recuperación está siendo más lenta, con señales esperanzadoras".
Más de medio centenar de trabajadores
La evolución ha permitido además reforzar la plantlilla con más de medio centenar de contrataciones. Se trata de un contexto positivo que, como explica Arconada, sigue centrando las inversiones de Michelin, y es que estas "tienen como destino los centros de producción que son competitivos, y por eso en Vitoria tratamos de que nuestros procesos lo sean". La planta de la firma francesa en Vitoria es la más grande de Europa con 3.500 trabajadores, además de dar trabajo a unas 600 empresas del territorio proveedoras de la fábrica. El empleo inducido de su actividad asciende a unas 14.000 personas. Es por lo tanto, un pulmón económico para Álava y el País Vasco que, además, aporta a la balanza comercial una potente inyección de ventas al exterior. Y es que exporta más del 90% de su producción.
Problemas con el suministro de caucho
El director de la planta de Michelín en Vitoria, Mariano Arconada señala que, de todas formas, "tiene que ser el mercado exportador el que confirme esas tendencias". Además, "hay que ser prudente pues estamos siendo afectados por los problemas de falta de suministro de caucho, acentuado por el bloqueo del canal de Suez". Y es que la compañía francesa no es ajena a los problemas de la logística internacional que está sufriendo retrasos y encarecimiento en el abastecimiento de materias primas. Michelin está acusando también el problema de los contenedores. Y es que el caucho que se emplea para la producción de los neumáticos proviene de Asia y el mercado de las importaciones está acusando la falta de contenedores por el desajuste generado durante la pandemia que ha dejado en Europa contenedores vacíos y material en Asia sin posibilidad de enviarse.
La planta ha sufrido problemas con los suministros que han afectado a momentos puntuales de producción, pero no al flujo previsto, ni a los objetivos. Esas faltas de determinados productos se están gestionando con la flexibilidad en la organización de los turnos, dentro de los acuerdos con la plantilla.
El neumático para turismos ya experimentó un repunte en la recuperación durante el 2020 con síntomas de mejora desde el verano, en cambio el de obras públicas y minería ha sido el que más despacio está recuperando. Aún así, la estrategia de Michelin sigue siendo la de combinar ambas líneas, así como, dentro del neumático de turismo, atender tanto a los fabricantes de vehículos, como a las actividades de reemplazo (talleres). Entre los fabricantes, destacan Peugeot, Renault, Nissan, Tesla, BMW, Mercedes.