El Grupo Industrial Cristian Lay sigue dispuesto a reabrir la fábrica de Corrugados Azpeitia e insiste en que su proyecto para poner en marcha la planta es "sólido y con desarrollo" y se ha transmitido paso por paso a las instituciones por vía oficial, algo demostrable según trasladan desde la compañía, mientras la alcaldesa de Azpeitia ha denunciado reiteradamente en los últimos días que, en realidad, nunca ha existido un "plan real" para reabrir Corrugados Azpeitia. Hasta ahora, la empresa se ha mantenido al margen de las declaraciones para "no presionar a las autoridades", quienes tienen la última palabra sobre la reapertura de la factoría.
Fuentes del grupo empresarial han asegurado que la compañía mantiene su voluntad de reabrir la siderurgia, aunque en su misma ubicación, lo que choca frontalmente con el criterio del Ayuntamiento de Azpeitia, que apoya la reapertura en Txukutxo fuera del núcleo de población. La empresa asegura que esta alternativa resulta "inviable" debido al retraso que supondría el traslado para el inicio de la actividad, el incremento de la inversión, además de una cuestión de "escollos legales" que involucra a sus anteriores propietarios.
"Si mañana quisieran sentarse a negociar lo iniciaríamos todo", esclarecen desde la empresa a este periódico, asegurando que se trata de un plan que se ha estudiado al detalle y "no es ningún farol o cortina de humo". El grupo extremeño insiste en que no quiere entrar en "polémicas políticas", pero asegura que se han llevado a cabo estudios que garantizan la viabilidad del negocio y creación de riqueza a largo plazo de la mano de expertos, incluida la búsqueda de un perfil directivo. El grupo alcanzó un acuerdo con los acreedores en forma de maquinaria, si bien el tiempo pasa y se necesitará algún tipo de respuesta para acometer el proyecto.
El grupo CL sostiene que en la actual ubicación la inversión sería cuatro veces menor, esto es, ascendería a 50 millones de euros -30 millones para la compra de maquinaria y el resto para materia prima-, mientras que generaría más de 700 empleos, de ellos 270 de manera directa y más de 500 indirectos. Según traslada, la viabilidad del proyecto se apoya en un estudio de Cuatrecasas para defender que los escollos urbanísticos no serían insalvables para la reapertura de la fábrica y están dispuestos a reunirse y participar en cuanto sea posible.
Algo que ha propuesto este jueves el secretario general del PSE-EE en Gipuzkoa, Eneko Andueza, que considera "urgente" la creación de una "alianza institucional" entre el Gobierno Vasco, la Diputación de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de Azpeitia para hacer posible la reapertura de Corrugados por parte del Grupo Industrial Cristian Lay.