Los médicos del IMQ asociados en Ademi han anunciado el rechazo al acuerdo de la dirección de la entidad con Adeslas para que esta eleve su posición al 50% de la aseguradora. Para estos accionistas, el IMQ ha acordado una venta encubierta de la entidad que supondrá la pérdida del control y ninguna garantía sobre el arraigo en Bizkaia y el mantenimiento del modelo. Es el resultado de su análisis sobre la oferta de Adeslas que la dirección del IMQ someterá a votación en la Junta de Accionistas el próximo 30 de junio. Ademi (Asociación para la defensa del modelo Igualatorio) es la agrupación de los médicos accionistas de la entidad contrarios a vender más acciones de la compañía a Adeslas. La entidad aseguradora de Caixabank y Mutua Madrileña se ha ofrecido a comprar acciones a los médicos que han mostrado su deseo de hacerlo a "precio de mercado" y que se han asociado en PAI (Plataforma de accionistas del Igualatorio).
Las acciones del IMQ están dividas en cerca de mil paquetes en manos de los médicos. Para los accionistas que quieren vender, Adeslas ha ofrecido 255.000 euros con la condición de no superar el 50% de la titularidad y comprometiéndose a mantener el modelo del IMQ y su sede en Bizkaia. Para los médicos contrarios a ceder más control a Adeslas la actuación de la dirección del IMQ "esconde la pérdida definitiva del control de la compañía". Estos accionistas, agrupados en Ademi, acusan a la dirección del IMQ de llegar a un acuerdo que "no es aceptable" y que supone "entregar IMQ" a Adeslas.
Control de Adeslas sobre el IMQ sin garantías
Según explican en su análsisis la oferta de Adeslas "esconde" un control real en el momento en el que establece elevar su actual 45% de las acciones al 50% como "condición inicial e innegociable" para cubrir las salidas de los accionistas que han mostrado su deseo de vender. Para Ademi, esos requisitios, consolidarían el control de Adeslas y una mayoría, gracias al reparto societario de la entidad, que permitiría a la entidad de Caixabank y Mutua Madrileña gestionar el IMQ con total libertad y sin el peso efectivo de los compromisos.
Ademi insiste además en que la operación planteada por Adeslas dificulta la venta de acciones que un futuro quieran realizar otros médicos, una vez sobrepasada la primera ventana. Además de que, consideran que daña el valor de la acción, dado que una vez consolidada la posición de Adeslas en la aseguradora con un 50%, se reduciría cualquier otra alternativa.
Esta agrupación de médicos defiende la posibilidad de comprar a los accionistas que desean vender recurriendo a los fondos del propio IMQ y a recursos financieros. Plantean la viabilidad de esta alternativa que "mantedría el control de las decisiones sobre el IMQ en los médicos". Así, han ofrecido con esta fórmula 260.000 euros por cada paquete accionarial, 5.000 euros más que lo planteado por Adeslas. El viernes de esta misma semana han convocado una reunión para explicar a los accionistas su propuesta.
Adeslas garantiza que su oferta asegura el modelo del IMQ
Tanto desde Adeslas, como desde la dirección del IMQ, se señala que el plantemiento de Adeslas pasa por respetar y mantener el modelo del IMQ, mantener la sede en Bizkaia y el peso del cuadro médico en la entidad.
El peritaje judicial que fijó el valor referencia en 246.286 euros
Los movimientos se habían acelerado una vez que el peritaje judicial sobre el IMQ, en las causas abiertas en la justicia, había fijado un valor de 246.286 euros por cada paquete accionarial. A partir de ese momento, y con los plazos a punto de expirar para la convocatoria de la Junta de Accionistas, la dirección del IMQ presidida por Begoña Astigarraga aceleró los contactos con Adeslas. La PAI llegó a fijar el precio de cada paquete accionarial entre 274.000 y 302.000 euros. En este sentido Ademi insiste en desarrollar su propuesta porque "permite a los médicos que desean vender obtener un mejor precio y dejar el control del IMQ en los médicos, además de asegurar el valor de la entidad".