La dirección del IMQ ha rechazado frontalmente la propuesta de los médicos de la entidad que se oponen a vender a Adeslas y que defienden comprar las participaciones a los titulares que desean vender a "precio de mercado" con los fondos del propio Igualatorio. El órgano directivo de la entidad, la Sociedad de Médicos, señala que la propuesta está llena de inconcrecciones y basada en "premisas falsas", "cálculos erróneos" y "no da ninguna garantía a los accionistas", además de implicar un "grave deterioro de la solvencia patrimonial de la entidad".
Es el último cartucho que se quema en la batalla por el control del IMQ. El planteamiento de la dirección para vender a Adeslas se someterá a votación el próximo 30 de junio y, según se acerca la fecha, crece la tensión entre los médicos dispuestos a aceptar la oferta de 255.000 euros por cada paquete accionarial ofrecida por la entidad de Caixabank y Mutua Madrileña o la opción de Ademi, que agrupa a los accionistas contrarios a la venta de Adeslas, y que eleva a 260.000 euros el precio de cada lote, pero comprado a costa de los recursos de la entidad.
La dirección ha querido dar su última palabra y tras un análisis de "varios días de trabajo", da un portazo que pretende ser definitivo a la propuesta presentada por Ademi en una misiva enviada ayer a los accionistas del IMQ enumera con más detalles los problemas que detecta y, por lo tanto, insiste que solamente el planteamiento de Adeslas es compatible con la viabilidad y será el que someta a votación en la Junta de Accionistas del próximo 30 de junio.
En el mensaje, la directiva presidida por Beatriz Astigarraga, acusa a Ademi de aportar datos "muy alejados de la realidad" y de contar con una tesorería de 77,5 millones, mucho más elevada que los 33,2 millones de euros que la dirección financiera de la entidad defiende como dato real. Con estos datos no se podría hacer frente a las 299 salidas inmediatas que defiende Ademi, sino tan solo a 127 accionistas.
En un análisis en el que solo se rebaten extractos de la propuesta de Ademi que son contestados, la dirección considera que recurrir a un endeudamiento futuro de 49,5 millones de euros para dar salida a otros 190 médicos que desearan vender sus participaciones gravaría las cuentas de resultados haciendo "imposible el reparto de dividendos en 5 o 6 años". También rechaza la posibilidad de venta de inmuebles y de dar entrada a un socio financiero. Por todo ello, la dirección del IMQ se reafirma en que la única oferta viable y que se someterá a votación en la Junta de Accionistas es la de Adeslas.
Mientras tanto la PAI, la plataforma que agrupa a los médicos partidarios de vender sus acciones a "precio de mercado" y que han forzado la oferta de Adeslas, condiciona el voto a "conocer los detalles del acuerdo", aún reconociendo que es un punto positivo la situación lograda. En este sentido reclaman un contacto directo con Adeslas para conocer todos los aspectos antes de tomar una decisión. La PAI ha convocado para el próximo 9 de junio una asamblea abierta en la que analizar todos los detalles y fijar una posición.
Adeslas comunicó que ofrecía a comprar acciones a los médicos que habían manifestado su voluntad de vender por 255.000 euros cada uno de los paquetes accionariales. A cambio, se comprometía a no superar el 50% de la aseguradora y respetar el modelo del IMQ, sus trabajadores y la sede social en Bizkaia. La dirección del IMQ, que había asumido la oferta para llevarla a la Junta de Accionistas, ha matizado varios detalles esta misma semana. Así, ha recordado en un circular que esos 255.000 euros están pendientes de una "auditoría previa" y que la compra en la primera ventana no se haría por Adeslas, sino que sería el propio IMQ el que adelantaría el dinero "hasta para 100 accionistas", mientras la entidad gestionada por Caixabank y Mutua Madrileña recibe las autorizaciones de Competencia pertinentes para aumentar su 45% de las acciones hasta el 50%.