Las agencias de viajes afrontan desde este lunes el proceso de reembolso por los importes de los bonos sustitutivos de las reservas canceladas por la pandemia de covid-19 emitidos durante el primer estado de alarma. En Euskadi, la situación es crítica para muchas de estas entidades, en pleno tira y afloja para que mayoristas (aerolíneas, cruceros y demás proveedores vacacionales) abonen el importe de los bonos que demandan sus clientes. "No quieren perder esa venta y la devolución se atrasa lo máximo posible, cada uno tiene su manera de trabajar con estos bonos y estamos negociando con cada uno de los proveedores para llegar a una solución", explica Lander Arriaga, propietario de Donosti Receptivo y una central que engloba a un millar de agencias en España
Después de un año del fin del primer estado de alarma, concluye el plazo concedido a las agencias de viajes para la devolución del dinero de los viajes combinados cancelados por la crisis sanitaria. Por ello, salvo que las partes -agencias de viajes y viajeros- pacten extender el plazo de los bonos, los clientes pueden solicitar su reembolso. En este sentido, como intermediarios, las agencias se encuentran contactando con proveedores para hacer frente a las reclamaciones de clientes que han decidido recuperar su dinero.
"Poco a poco los vamos recuperando pero muchas compañías nos piden tiempo por falta de liquidez", explica Eneko Ibarnia, presidente de la Asociación de Agencias de Viaje en Álava al frente de Samarkanda, "en muchos casos hemos tenido que adelantar el importe, pero trabajas con la confianza y muchos clientes lo entienden". Según explica, los mayoristas especializados en productos internacionales y compañías navieras son los casos más graves, a falta de ingresos y, por lo tanto sin posibilidad de devolución.
"Largas" de compañías aéreas
De acuerdo con la normativa general de viajes combinados, cuando ocurren este tipo de circunstancias inevitables en el lugar de destino, el viajero tiene derecho a cancelar la reserva de forma previa y a obtener el reembolso de lo ya abonado. No obstante, ante la cantidad de viajes que iban a ser cancelados, y teniendo en cuenta que los vacacionales iban a estar paralizados durante un tiempo, el Gobierno central permitió a las agencias ofrecer un bono sustitutivo al cliente, en lugar del reembolso directo de los importes, a utilizar durante el año siguiente al fin del estado de alarma y sus prórrogas.
Por otro lado están los vuelos y otras contrataciones sin combinación, cuyos bonos a los que han optado los clientes "no tienen fecha de caducidad", y muchas compañías aéreas se resisten a reembolsar. "Algunas han devuelto el importe y otras, como Iberia, han ampliado el plazo de utilización de los bonos varios meses, pero en muchos casos seguimos peleando para que el dinero llegue a manos del cliente", explica Enrique Varona, presidente de la Asociación de Agencias de Viaje de Gipuzkoa, "en mi caso, Vueling tendría que devolver 4.000 euros, de tres grupos de viajeros solo ha aceptado la devolución de uno".
El foco del sector está hora la reactivación del turismo, lo que implica la reapertura de fronteras; la entrada en vigor del pasaporte sanitario y el aumento del número de personas vacunadas, muchos agentes, piden además al Gobierno que intervenga y cambie la normativa que hace a las agencias responsables del bono, así como sensibilidad a sus clientes, después de que, en mayo pasado, la Confederación Española de Agencias de Viajes (Ceav) ya lanzara una campaña con la que pretendía concienciar a la opinión pública para que les ayude con la prórroga de la validez de los bonos.