El Consejo Gestor del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas ha decidido este martes remitir al Consejo de Ministros el rescate por 25,03 millones de euros del grupo industrial Rugui, dedicado a la fabricación y venta de productos siderúrgicos de alta calidad que tiene plantas en el País Vasco.

Así lo han confirmado a Efe fuentes de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), gestora del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas azotadas por la pandemia, a través del cual se canalizará esta ayuda.

Se trata del sexto rescate impulsado por este Fondo desde que se creó en julio del año pasado, junto a los de Air Europa, Ávoris, Plus Ultra, Duro Felguera y Tubos Reunidos. La ayuda de 25,03 millones de euros consistirá en un préstamo participativo de 13.525.000 euros y otro ordinario de 11.500.000 euros.

El Consejo Gestor del fondo ha decidido aprobar esta ayuda después de analizar la situación económica y jurídica de la empresa, del impacto sufrido a consecuencia de la pandemia de covid-19, de su plan de viabilidad y de las perspectivas de evolución del grupo y del sector al que pertenece.

También se han analizado exhaustivamente las garantías aportadas por la compañía para asegurar la devolución de este apoyo financiero público temporal.

Las citadas fuentes aseguran que el cumplimiento de todas las condiciones de elegibilidad exigidas por la normativa aplicable al fondo de rescate, desde el punto de vista jurídico y financiero, así como la suficiencia de las medidas planteadas en el plan de viabilidad y la capacidad de devolución de los fondos públicos aportados, han sido validados por asesores independientes.

En el estudio de la operación se ha tenido también en cuenta el criterio de la Consejería de Empleo e Industria de Castilla y León, que ha informado favorablemente sobre el carácter estratégico del Grupo Rugui para esa comunidad autónoma.

Fundado en 1953, el Grupo Rugui tiene presencia en País Vasco (en Gernika y Azkoitia), Navarra y Castilla y León, donde ha invertido 140 millones de euros en la última década. El 75 % de sus ventas se produce en el extranjero. Además de la matriz, Rugui Steel SL, el grupo cuenta con ocho filiales participadas al 100 % y una plantilla de 300 trabajadores, aunque su actividad genera alrededor de mil empleos indirectos.

El Grupo tiene una relevancia especial para Soria, la provincia con mayor declive demográfico y con un paro del 11 %. En la localidad soriana de Ólvega se encuentra la única acería de toda Castilla y León, donde se concentra casi el 40 % de sus empleados.

Según su plan de negocio, en 2023 sus productos serán neutros en carbono, con lo que podría ser la primera siderúrgica del mundo en conseguirlo. Rugui utiliza un proceso productivo basado en hornos de fusión por inducción, sustituyendo el uso de energía química por eléctrica. Además, recicla la chatarra férrica de alta calidad que genera la automoción en el norte de España.

Su negocio se vio debilitado en 2019 debido a factores como el estancamiento del mercado alemán, el Brexit o los aranceles estadounidenses, que afectaron a todos los sectores en los que opera, incluidos el de la construcción y la automoción.