Egoin, y más concretamente Desarrollos de Madera Olatek, es la nueva propietaria de las instalaciones de la antigua ICOA de Legutiano. Tal y como adelantaba 'Crónica Vasca', esta factoría local de maderas se instalará en este terreno con un inversión de 25 millones de euros, con la que busca consolidarse como el mayor productor nacional de madera caontralaminada industrializada para el sector de la construcción. La empresa, que dispone de dos plantas en Ea y Legutio, va a dar un importante salto en su capacidad productiva de madera CLT y laminada, pasando de los 22.000 m3 actuales a los 52.000 m3, y espera generar alrededor de 100 puestos directos de trabajo.
Las obras de remodelación de las instalaciones ya han arrancado -las primeras máquinas se instalarán este trimestre- y se extenderán durante todo el año 2022. La puesta en marcha de la nueva planta productiva se prevé para el primer trimestre de 2023. Esta inversión también va a suponer la incorporación de las tecnologías productivas más avanzadas, que permitirán un incremento notable en el aprovechamiento de la madera, la productividad y la calidad de sus productos.
También se va a abordar la modernización de las instalaciones productivas existentes con una orientación a la Industria 4.0, reforzando los equipos de ingeniería y diseño, y dando un importante salto en el ámbito de la digitalización BIM -Modelado de Información de Construcción- de toda la cadena de valor, que incluye desde la ingeniería y el diseño hasta el montaje secuenciado, pasando por la fabricación y la logística.
Desarrollos de Madera Olatek nace en 2015 dentro de la empresa Egoin, que ya cuenta con más de 30 años de trayectoria. Este grupo vizcaíno se dedica a las soluciones en madera laminada y contralaminada tanto para la construcción de viviendas como de edificios. La parte de Olatek cierra el proceso productivo con la ejecución de una primera transformación del tronco en tablón a través del proceso de aserrado y secado y la segunda transformación convirtiendo los tablones en láminas que tras su encolado y prensado, forman vigas laminadas estructurales tanto rectas como curvas.
Hasta el momento se desconocía quien iba a ocupar el lugar de la antigua ICOA pero las última señales procedieron el pasado verano de SADER, Sociedad Anónima para la Descontaminación y Eliminación de Residuos. Sin embargo, esto era algo que para nada gustaba a los vecinos de la zona, ni tampoco al Ayuntamiento de Legutio, y comenzaron una serie de protestas para paralizar la llegada de empresas contaminantes a esta zona.