La automoción vasca está acusando con fuerza los parones de la crisis de los semiconductores y cada vez son más las empresas que se resienten de la falta de piezas y del descenso de la producción de vehículos.
Pese a que compañías como CIE Automotive, que publicó ayer resultados, salva con creces en conjunto con los nuevos primeros meses del año y recupera niveles pre-Covid, lo cierto es que en este tercer trimestre también ha acusado la crisis de suministros. El propio consejero delegado de la compañía, Jesús María Herrera, reconocía ayer que la escasez de semiconductores, encarecimiento de materias primas y energía "están estresando las cadenas de suministro como nunca antes". Esto podría lastrar sus resultados a finales de año y alejarlos de las previsiones, según diversos analistas.
Las dificultades, que empezaron en empresas como Mercedes, que ha tenido que parar ya varias veces la producción por falta de semiconductores, se ha ido extendiendo a la industria auxiliar. La planta alemana ubicada en Vitoria tiró del sector con unas previsiones de producción que hasta el mes de julio situaban la fabricación de furgonetas en cifras récord, cerca de las 150.000 unidades. Un escenario que, en el primer semestre, había tirado para arriba del sector. Pero el impacto de los semiconductores llegó con fuerza a la automoción vasca en el periodo estival.
Al final, las producciones previstas para este 2021, a pesar de que se planteaba como el año de la recuperación, están empezando a ajustarse acercándose a las cifras del pasado 2020. Aún así, los ajustes realizados a raíz de la pandemia, están permitiendo obtener mejores márgenes de beneficio sobre las ventas.
Complicaciones en Gestamp
Por ejemplo Gestamp, ha tenido que ampliar su ERTE afectada por el parón de Mercedes, sumados a otros en Opel, Seat y Volkswagen, que afectan directamente a la compañía vizcaína.
Precisamente respecto a esta empresa, analistas de Renta 4 consideran que tiene una "situación compleja" a corto plazo, debido precisamente a estas paradas obligadas provocadas por las dificultades de abastecimiento de semiconductores. Así, consideran que cumplir los objetivos previstos para este año "se presenta como un mayor reto de lo que se podía esperar hace escasos tres meses, tras un tercer trimestre de volúmenes muy por debajo de lo esperado, y un mes de septiembre especialmente negativo".
Más empresas en fase de estancamiento
El informe de coyuntura de las empresas del Metal de Bizkaia, que adelanta la posibilidad de que entremos en una nueva crisis a causa de los problemas de suministros y del precio de las materias primas y de la energía, apunta precisamente a que el sector de la automoción es uno de los más afectados.
Según se constata en este informe, en el sector de la automoción aumentan las empresas que están en fase de estancamiento, que pasan del 34% al 41%. Por lo que consideran que "la recuperación en este sector continúa siendo más costosa que en otros".
Si en general aumentan las empresas que consideran que tienen una cartera de pedidos débil, estás se incrementan de forma significativa en el caso de empresas del sector de la automoción que pasan del 46% al 63%, y la facturación se ha reducido en su conjunto un 18% para estas empresas.
Y entre los clientes de las empresa del Metal son las empresas de automoción las que tienen peores perspectivas de actividad para el cuarto trimestre con solo un 41% por encima del 75% de lo que sería un año normal, lo que hace prever que la crisis puede mantenerse en el tiempo.
Otra cosa será cómo termine afectado esta crisis de este sector tan importante dentro de la industria vasca al conjunto del crecimiento económico, muy condicionado también por el elevado precio de la energía que está lastrando la recuperación de muchas empresas.