La firma inmobiliaria de apartamentos turísticos y de media estancia All Iron RE I Socimi logró un beneficio neto de 2,7 millones de euros en el primer semestre de este año, frente a los 398 mil euros del mismo periodo del ejercicio anterior, lo que supone multiplicar por más de seis sus benefiicios en un ejercicio especialmente complicado para el turimo por la crisis del Covid.
All Iron es una empresa nacida en Bilbao -aunque con domicilio en Madrid- perteneciente al Grupo All Iron capitaneado por Ander Michelena y Jon Uriarte. Está especializada en la compra y rehabilitación de inmuebles para su explotación como alojamientos urbanos alternativos (apartamentos) destinados tanto al sector turístico y de negocios.
La compañía registró en el primer semestre ingresos por importe de 607 mil euros, un resultado de explotación sin extraordinarios en equilibrio y un beneficio neto de 2,7 millones, apoyado en la revalorización de la cartera, según las cifras publicadas en la BME Growth, mercado en el que cotiza.
Según la firma, estos resultados son fruto de la revalorización de su cartera de activos, cuyo valor ascendía al cierre del primer semestre a 128,4 millones de euros, lo que representa una revalorización neta de 3,45 millones de euros, una vez excluido el importe de las inversiones realizadas. De esta cartera de activos se reparte actualmente en un 22% en Valencia, 20% en Vitoria, 13% en Barcelona y Budapest, 8% en Sevilla y Bilbao, 7% en Madrid, 4% en Donostia, 3% en Pamplona y 2% en Córdoba.
Durante este periodo All Iron Socimi reforzó su estrategia de crecimiento con inversiones de 70 millones de euros para la adquisición de siete nuevos activos. para ello acometió una amplición de capital hasta 135 millones de euros.
Entre las últimas operaciones de la empresa está la adquisición en el mes de junio de un nuevo inmueble en Barcelona por un importe de 15,4 millones de euros, un hotel de tres estrellas que prevé transformar en un complejo de 38 apartamentos destinados a alojamiento de corta y media estancia. Unos meses antes cerraba la adquisición de un inmueble en Bilbao por un importe de 5,1 millones de euros, que se suma a otros dos edificios en la capital vizcaína, uno de ellos ya en funcionamiento de la mano de la operadora Líbere Hospitality.