La fábrica de Mercedes de Vitoria sigue acusando los problemas con el suministros de chips semiconductores y volverá a los parones de su producción, al menos durante cuatro días en diciembre. La última semana del año ha sido descartada ya definitivamente por la dirección de la empresa y los días 27, 28, 29 y 30 diciembre, no habrá actividad "por falta de componentes".
De momento y, a pesar de "la incertidumbre existente respecto al suministro de piezas", la producción sí mantiene para la próxima semana en tres turnos de trabajo, pero sin recurrir al sábado. La explanada de la fábrica acumula ya unas 4.000 furgonetas pendientes de finalización por falta de microchips y otros materiales electrónicos, según señalan fuentes sindicales. Es la cantidad que resulta de tener que dejar unas 400 furgonetas cada día sin poder entregar y a la falta de la llegada de suministros.
La producción de Mercedes se va mermando de esta manera semanalmente y ya ha pasado de la previsión de 148.600 unidades para 2021 de la que se hablaba en abril, a las 134.500. Puede que incluso sean menos. Según confirmaba 'Crónica Vasca', en las comunicaciones que hay entre la dirección y los proveedores, se cuenta con un volumen de 125.000, cifra muy similar a la de 2020, el año de la pandemia.
Ocho semanas continuadas de actividad
La dirección de la planta trata de hacer equilibrismos casi imposibles para no frenar la producción en función del 'stock' de que dispone de los ya famosos microchips, un esfuerzo que supone adaptar las cantidades de fabricación diaria de cada modelo de furgoneta. Una complicada tarea que los responsables de logística están desarrollando conseguiendo ocho semanas continuadas de producción.
La crisis afecta a todo el sector y no es una cuestión exclusiva de Mercedes. La automoción vasca está acusando con fuerza los parones de la crisis de los semiconductores y cada vez son más las empresas que se resienten de la falta de piezas y del descenso de la producción de vehículos. Empresas como Gestamp, han tenido que recurirr a un ERTE por el parón de Mercedes, sumados a otros en Opel, Seat y Volkswagen, que afectan directamente a la compañía vizcaína. El informe de coyuntura de las empresas del Metal de Bizkaia, que adelanta la posibilidad de que entremos en una nueva crisis a causa de los problemas de suministros y del precio de las materias primas y de la energía, apunta precisamente a que el sector de la automoción es uno de los más afectados.