Iberdrola, a través de su filial estadounidense de renovables Avangrid, ha cerrado formalmente el acuerdo alcanzado con el fondo Copenhagen Infrastructure Partners (CIP) para asumir el control de más de 2.000 megavatios (MW) de energía eólica marina en Estados Unidos (EE.UU.).
Según ha explicado este martes Iberdrola en un comunicado, gracias a la reestructuración de Vineyard Wind, la sociedad conjunta creada entre Avangrid y CIP, la energética española se hará con el control de los proyectos eólicos marinos Commonwealth Wind (1.232 MW) y Park City Wind (804 MW).
Todo esto apenas unos meses después de que el regulador del estado de Nuevo México tumbara por unanimidad la operación en la que Iberdrola trabajaba desde hace un año para hacerse, a través de Avangrid, con PNM Resources. Decisión influída por la situación que atraviesa la empresa y su presidente, José Ignacio Sánchez Galán, por su relación con el caso Villarejo.
Según informa Efe, el acuerdo alcanzado con su socio CIP el pasado mes de septiembre incluía una compensación económica de 167,7 millones de dólares (unos 143 millones de euros), y permitirá a Iberdrola consolidar su posición como uno de los mayores promotores de esta tecnología en el país norteamericano.
En cuanto al proyecto Commonwealth Wind, situado en el estado de Massachusetts, este fue seleccionado el pasado mes de diciembre para suministrar energía eólica marina a las compañías eléctricas de la región. Además, creará 11.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo a lo largo de su vida útil y generará energía suficiente para abastecer a 750.000 hogares al año.
Por su parte, Park City Wind, situado en el estado de Connecticut, se encuentra en avanzado estado de desarrollo y cuenta con un contrato de compraventa de energía (PPA) asegurado.
En virtud del acuerdo, Vineyard Wind 1, de 800 MW, seguirá participado por ambas compañías al 50 %, aunque Avangrid se reserva el derecho a tomar el control del proyecto durante la fase de explotación.
Este proyecto, que comenzó a construirse en el último trimestre de 2021, entrará en operación en 2024, convirtiéndose en el primer parque eólico marino a escala comercial que opere en EE.UU.
Así, la cartera eólica marina de Iberdrola en EE.UU., que alcanza los 4.900 MW de proyectos, podría alcanzar una inversión superior a los 15.000 millones de dólares (unos 13.250 millones de euros) en los próximos años.