El secretario general de Industria, Raúl Blanco, estará este viernes en la fábrica que tiene Mercedes en Euskadi para presentar las convocatorias del PERTE más importante de los fondos europeos para España. Se trata del plan estratégico de la automoción y el vehículo conectado que cuenta con una inversión de 24.000 milllones de euros en el conjunto del país y para el que la industria vasca, según se recoge en el documento del Gobierno vasco 'Euskadi Next Generation EU', espera generar actuaciones por más de 2.100 millones. Los grandes proyectos como la fábrica de celdas de batería 'BasqueVolt', la 'fábrica conectada e inteligente' de Gestamp, el centro de fabricación avanzada de Mercedes, los laboratorios de movilidad o la digitalización de las carreteras forales son algunas de las líneas que podrían aspirar a estas convocatorias que buscan ordenar la llegada del coche eléctrico y financiar las inversiones para que su industria y proveedores puedan afrontar las actuaciones necesarias.
Al encuentro, tal y como ha anunciado el delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, acudirán las principales empresas de la automoción vasca y la consejera de Desarrollo Económico del Gobierno vasco, Arantxa Tapia. La presentación tendrá lugar en la fábrica más grande de Euskadi y en el pulmón de la automoción vasca: la planta de Mercedes de Vitoria. El director de las instalaciones, Emilio Titos, hará de anfitrión del acto y es que la compañía germana es también uno de los principales interesados en esta línea de ayudas, la más importante de los 70.000 millones de ayudas directas con las que cuenta España para transformar el tejido económico.
Mercedes afronta una inversión de 800 millones de euros para ampliar sus instalaciones en Euskadi en una apuesta que la multinacional alemana enmarca en su camino hacia el vehículo eléctrico. Daimler ya ha hecho público que en 2030 ya no construiriá vehículos de combustión y ha aprobado un plan de inversión de 60.000 millones en los próximos cuatro años para adaptar sus fábricas. De hecho, en Vitoria, se ha paralizado la siguiente versión de la Vito, para impulsar un nuevo vehículo con plataforma diseñada para un coche 100% eléctrico.
El PERTE de automoción es el primero que aprobó el Gobierno de España y se esperaba que las convocatorias de los ministerios que reparten sus ayudas en libre concurrenia a los diferentes proyectos impulsados por los consorcios de empresas empezaran a convocarse el mes pasado. El plan de ayudas y su acceso a través de estas ventanas será explicado mañana en el corazón de la industria de la automoción vasca por uno de los responsables del gobierno que más está interviniendo en su diseño, Raúl Blanco.
Según se recoge en el documento en el que el Gobierno vasco reúne los proyectos que aspiran a recibir financiación europea, este PERTE de la Automoción reúne una inversión total de 2.100 millones de euros. Entre otros está el centro de fabricación avanzada en automoción de Mercedes en Vitoria, con 30 millones, la fábrica 'inteligente' de Gestmap con 200 millones o el proyecto de la gigafactoría de celdas de batería BasqueVolt, con 882 millones de euros, que el Gobierno vasco presentó en su lista prioritaria a la ministra de Economía, Nadia Calviño. También se recogen los 181 millones para la digitalización de la red de carreteras forales.
Conviene recordar que el Gobierno central ha dispuesto el reparto de los fondos europeos con la UE a través de dos vías. Por un lado, a través de las convocatorias que ya están vehiculizando con las comunidades autónomas y que están sujetas a unas bases iguales para todos pactadas con las conferencias sectoriales y a las que se pueden presentar empresas, ciudadanos y administraciones. Euskadi, por esta vía se ha adjudicado ya 495 millones de euros. Y, por otra parte, la otra fórmula de la llegada de los fondos es financiando estos grandes proyectos estratégicos, denominados PERTE, que afectan a toda la cadena de valor de un sector y en los que participan varias grandes empresas, administraciones públicas y se busca también el compromiso de 'pymes'. Así de los 70.000 millones en ayudas directas a fondo perdido con los que cuenta España, más o menos la mitad se dedican a una cosa y los otros 35.000 millones a la otra.
El Gobierno vasco había trasladado cierta inquietud por el retraso de estas grandes convocatorias que también estaban reclamando grandes empresas, así como por los tres proyectos destacados que remitió por carta a la ministra de Economía, Nadia Calviño.
El caso es que las convocatorias para estos 35.000 millones deben repartirse en seis líneas de acción:
1. Vehículo eléctrico. PERTE aprobado. 24.000 millones. Pendiente de publicarse convocatorias previstas para fin de este año.
2. Salud de Vanguardia. PERTE aprobado. 1.469 millones. Pendiente de publicarse convocatoria
3. Español: nueva economía de la lengua. Anunciado
4. Aeroespacial. En estudio
5. Cadena agroalimentaria
6. Transición Energética. Aprobado con una convocatoria de 500 millones ya anunciada