El proyecto Ekiola, destinado a construir plantas solares en diferentes municipios vascos gestionados en régimen de cooperativa por los vecinos, suma ya 13 emplazamientos desde que arrancó la iniciativa hace ahora un año.
La previsión es que la construcción de las primeras plantas fotovoltaicas arranque en el mes de septiembre, una vez se ultime el trámite de los permisos necesarios, según señala la directora de Ekiola, Amagoia Barandiarán a Crónica Vasca.
El primer parque solar en iniciar la construcción será el que estará en la localidad de Azpeita, porque es la primera cooperativa que se constituyó y por lo tanto la que tiene más avanzado el trámite de los permisos. Una vez finalice este proceso se formalizará la captación de socios y se arrancará con la construcción de la planta, ya en el mes de septiembre. El plazo de construcción será de unos tres meses.
Se trata de construcciones en suelo, preferentemente en suelos degradados que se recuperan, con una potencia que puede oscilar entre 1 y 5 Mw y que ocuparán un mínimo de 10.000 metros cuadrados, aproximadamente la superficie que ocupa un campo de fútbol, lo que supone una capacidad para generar energía para 400 familias.
"Este es el tamaño mínimo para que la instalación sea rentable", señala Barandiarán. "El parque solar se conecta a la red eléctrica de distribución, es decir, que los socios cooperativistas van a seguir recibiendo la energía que consumen sin ningún tipo de obra. Esta conexión a la red general tiene un coste que es elevado y que hace que la instalación no sea rentable si su tamaño es inferior a una hectárea".
La instalación no tiene ánimo de lucro. Es decir que el socio de Ekiola no va a poder comerciar con la energía que genere su parque, algo que podría verse como un negocio muy rentable en estos momentos teniendo en cuenta cómo está el precio del kw, Solo garantizará la energía para su consumo.
Esta misma semana se ha presentado la cooperativa para la zona de Lea Artibai constituida por los ayuntamientos de Berriatua, Etxebarria, Ispaster y Markina-Xemein, al que se pueden sumar también los de Lekeitio y Ondarroa. Esta es, de momento la primera en Bizkaia, pero hay otras seis en Álava y seis emplazamientos más en Gipuzkoa, aunque habrá que esperar a que estén avanzados los proyectos para saber qué número de vecinos se convierten finalmente en socios cooperativistas de la energía sostenible, ya que ese es un trámite que solo arranca cuando ya se tienen concedidos todos los permisos para poner en marcha la instalación.
"En una primera fase es Ekiola Energía, constituida por el EVE y Krean, de grupo Mondragón, la que asume el riesgo de la inversión para sumar después a los cooperativistas", señala la directora.
El desembolso que deberán hacer los cooperativistas es irregular según las zonas. "No va a ser lo mismo el coste de la inversión en Álava, en suelo liso, que en un terreno más complicado; dependerá de lo lejos que esté el enlace con el sistema general o de los paneles solares que necesite una familia para abastecer sus necesidades de energía", dice.
En cualquier caso, estima que con las diferencias precisas se calcula una inversión media entre 1.000 y 2.500 euros, para instalaciones que tendrán un plazo de trabajo de unos 25 años. Una inversión a la que habrá que añadir después los gastos de mantenimiento de las instalaciones o los pagos de los peajes energéticos.
Para financiar estas inversiones el EVE ha activado una partida de ayudas que pretende promocionar el autoconsumo mediante fuentes renovables como la solar fotovoltaica y la minieólica.
En total hay un montante de 37 millones de euros para generalizar el acceso a la producción renovable, y se financiarán hasta el 70% de la inversión . Se apoyará de manera especial a las instalaciones realizadas en municipios de menos de 5.000 habitantes. Estas ayudas contribuirán a aumentar el parque solar en más de 4.000 instalaciones.