Debido a la situación del mercado actual y al aumento de sus clientes, el gestor de residuos Tratamientos Geuria ha solicitado ante el Órgano Ambiental competente del Gobierno vasco la concesión de la Autorización Ambiental Integrada para incrementar sus capacidades de almacenamiento y de gestión en Irun, así como la tipología de residuos a gestionar.
Ubicado en el Polígono Industrial Bidaurre-Ureder de Irun, Geuria se dedica a la gestión de residuos peligrosos y no peligrosos, al almacenamiento temporal de los mismos, a su tratamiento y su posterior transporte hasta gestores finales. Así, tramita este proyecto con el interés de garantizar la continuidad de su actividad.
De esta manera, solicitan un leve incremento en la capacidad de almacenamiento de la instalación, desde las 43 toneladas de residuos peligrosos, hasta las 59.56 toneladas. Así, una mayor capacidad de almacenamiento “permitiría optimizar las operaciones desarrolladas principalmente, en lo referente a los transportes, y a la continuidad de los procesos de electrólisis y evaporación”, detalla el escrito del proyecto.
El proyecto no supone cambios de infraestructuras
A su vez, el estudio señala que este planteamiento no supone modificaciones de infraestructuras en las instalaciones para albergar un mayor almacenamiento, ya que “las existentes son suficientes para ello en condiciones de seguridad”.
En cuanto a la tipología de residuos a tratar, solicitan incorporar a su autorización aquellos residuos en cuya gestión ha intervenido en los últimos años bajo la figura de negociante. Es decir, aquellos procedentes de industrias del sector fotográfico, artes gráficas, sector sanitario, obras de construcción y pintores.
Sin vertidos de carácter contaminante
Por otro lado, el estudio del proyecto advierte que los procesos desarrollados en la actividad del vertedero "no implican generación de emisiones atmosféricas ni ruido significativos", por lo que no se prevén molestias a las especies naturales ni a la población cercana. El grueso de la actividad se desarrollará en todo momento dentro de la nave, quedando los residuos gestionados "a cubierto y claramente delimitados según sus características".
También señala que "no hay generación de vertidos de carácter contaminante". Así, solo se verterán aguas sanitarias y pluviales que estarán canalizadas a la red de saneamiento municipal. Finalmente el proyecto contempla que "la gestión de los residuos peligrosos y no peligrosos se realizará conforme a la legislación vigente en materia de residuos y se enviarán a plantas de tratamiento autorizada".