En medio de una crisis de suministros, la salida de la pandemia y una tensión geopolítica llena de incertidumbres económicas, Gestamp no se amedrenta y da otro paso al frente en su apuesta internacional. Edscha, especializada en puertas traseras, cierres, frenos de mano y bisagras para automoción, propiedad de la firma de Francisco Riberas ha anunciado un acuerdo con la india Aditya Auto para cooperar en el desarrollo de piezas como pestillos, controles de puertas, sistemas de bisagras o frenos de mano. La operación, que supone la primera 'joint venture' de la compañía alemana, permitirá a la filial de Gestamp desembarcar en un mercado con un increíble potencial de crecimiento como es el indio.
Fuentes de la matriz resaltan a este diario "lo pionero" del movimiento y el gran potencial que puede suponer este mercado. El segundo país más poblado del mundo, con 1.390 millones de personas, tiene 30 coches por cada 100.000 habitantes cuando la media mundial es de 155 y es uno de los mayores productores de automóviles del mundo: el año pasado ensambló más de 4,1 millones de unidades. La activación de este mercado dejaría ante la filial de Gestamp la posibilidad de entrar en un país donde la demanda de turismos tendría que quintuplicarse solo para igualar con la demanda media de coches en el mundo. La unión con uno de los principales proveedores de automoción en el mercado indio supondrá su primer contacto con el subcontinente y un "acceso directo" acompañado de un socio muy consolidado y con el que compartirán la alianza, que pasará a llamarse 'Edscha Aditya Automotive Systems', al 50%.
La 'joint venture' supone para Gestamp un refuerzo más en el mercado indio, donde la matriz ya tiene tres plantas: dos en Pune y otra en Chennai, a los que se suma otro centro tecnológico también ubicado en Pune. En conjunto, Gestamp emplea a 1.700 personas en India. Desde Edscha, su director ejecutivo, César Pontvianne de la Maza, ha insistido en la misma idea de la gran oportunidad de crecimiento que se presenta en India, "un punto en blanco en nuestra red de producción global" al que se ha referido como un "importante mercado en crecimiento".
A pesar de Rusia
Con este movimiento, Gestamp se acerca más a Asia en un momento donde el punto intermedio entre Oriente y Europa, Rusia, no ha hecho más que traer quebraderos de cabeza al sector de la automoción. Tanto Gestamp como CIE Automotive se vieron obligadas en marzo a parar su actividad tras el comienzo de la invasión rusa en Ucrania a causa de las sanciones recíprocas entre Europa y la república de Putin y los problemas de suministros derivados de esa guerra comercial.
Con una facturación de 924 millones de euros en 2021, el próximo martes Gestamp afronta su Junta de Accionistas y hará entrega de los resultados del primer trimestre. Los resultados a cierre del 2021 sorpredieron positivamente a los analistas y las cuatro plantas de la firma en Rusia -una en San Petersburgo, otra en Kaluga y otras dos en Togliatti- apenas representaban un 1,3% de los ingresos del grupo de Riberas. Los resultados de este primer trimestre servirán como termómetro del sector de la automoción.