Las 24 horas que quedan por delante son las claves. El calendario de la operación ha sido amplio, pero Indra trabaja ahora a contrarreloj para hacer realidad las modificaciones que permitan el cambio de mayoría en el consejo de administración. Una operación que requiere de cambios en la estructura accionarial que tienen que darse en las próximas horas si se quiere hacer realidad en un consejo donde los independientes contrarios a la entrada de Indra en ITP y la dotación de poderes ejecutivos a Marc Murtra son mayoría. En la cúpula de la firma, pese a lo complejo de la operación y el apurado 'timing', hay confianza en que se puede hacer según fuentes cercanas al proceso del fabricante vasco de motores de aviación.

Son varias las opciones que hay encima de la mesa. La clave pasa porque Juan Moscoso y Jokin Aperribay accedan al consejo de administración. El nombramiento del que será el tercer consejero de la SEPI no irá a la junta de accionistas, pero se abordará en un consejo de administración previo a la junta de accionistas que aspira a tener la llave de la operación de ITP. En el caso de SAPA, este miércoles tiene que llegar al 7,89% para poder tener el consejero que pide y que el presidente de la Real Sociedad sea el representante del 'holding' de los Aperribay en el órgano directivo de Indra. El nombramiento de Aperribay cuenta con una fuerte oposición de los independientes 'rebeldes' que impidieron la toma de poderes ejecutivos por parte de Murtra y así quedó reflejado en el informe de la Comisión de Nombramientos que lidera Alberto Terol. También son contrarios al nombramiento de Aperribay los 'proxies' que asesoran a accionistas de la tecnológica española.

El contrapeso a esa oposición será, aparte de la propia SEPI y de SAPA, Amber Capital. El fondo que lidera Joseph Oughourlian, presidente de Prisa, cuenta con un 4,2% de Indra que se pondrá del lado de todas las intenciones del Gobierno central y del que también se especula que aumente su participación para poder sumar otro consejero en el cambio de mayoría. En el órgano directivo de Indra se da por descontada la marcha de Alberto Terol, líder de los 'rebeldes' opuestos a Indra. El papel de Ignacio Mataix como consejero delegado y vocal en el consejo de administración ha sido objeto de titulares en uno u otro sentido, si bien ahora mismo, según fuentes consultadas por 'Crónica Vasca', está más cerca de coger la puerta de salida que de atornillarse a su sillón en la dirección de Indra.

Entre los independientes, Enrique de Leyva será favorable a los cambios del Gobierno central. La junta de accionistas, además, tendrá que validar la renovación de Isabel Torremocha, Francisco Javier García y Luis Abril -consejero ejectuivo de la firma- como miembros del consejo de administración, al igual que los cargos de los dos consejeros que ya tiene la SEPI en Indra: Miguel Sebastián y Antonio Cuevas. En el seno de los independientes, además, algunos 'proxies' han cuestionado a Carmen Aquerreta, a la que reprochan haber sido socia de Deloitte, que es ahora el auditor de cuentas de Indra y que, salvo sorpresa, será renovado como tal este jueves.

De salir adelante los cambios que pretenden la SEPI, Amber Capital y SAPA, el camino quedaría completamente allanado para acceder a ITP independientemente de que Murtra tenga o no poderes ejecutivos. La mayoría en el consejo de administración sería distinta e incluso en el caso de que se diese un empate entraría el juego el voto de calidad del presidente no ejecutivo de Indra. La tecnológica podría acceder así al accionariado del fabricante vasco incluso antes del 30 de junio, con la autorización del acuerdo suscrito entre Rolls-Royce y Bain Capital prevista para el consejo de ministros de la semana que viene, el 27 de junio, adelantado al lunes ante la cercanía de la cumbre de la OTAN. Si los planes no saliesen adelante quedarían abiertas las opciones que el fondo norteamericano ha garantizado a Indra para acceder a ITP Aero, aunque habría que ver con qué condiciones permitirá Bain el acceso de Indra a ITP. El Gobierno vasco, por el momento, sigue con pie y medio fuera del accionariado del fabricante, al que aspira a acceder con un consejero y garantías de arraigo a Euskadi.