Neinor arranca la construcción de las 80 nuevas viviendas en Zorrozaurre

Neinor ya ha arrancado las obras de un proyecto icónico en Bilbao como serán las nuevas viviendas en la Punta Sur de la Isla de Zorrozaurre. Unas promociones en las que la compañía va a invertir 35 millones de euros y que contribuye al proceso de regeneración urbana de esta zona de la ciudad, que supuso la apertura completa del canal de Deusto. 'Zorrozaurre Homes', contará con 80 viviendas de 2 y 3 dormitorios destinadas a la venta, totalmente exteriores, repartidas en dos edificios de diseño moderno y elegante con  doble orientación y amplias terrazas con vistas a la Ría.

Unas viviendas que están diseñadas conforme a los más altos estándares de calidad y sostenibilidad. Tendrán piscina con zona solárium en azotea, cuarto para bicicletas y cargador de coche eléctrico, en línea con el compromiso con la  movilidad sostenible. También incluye cocinas amuebladas y equipadas con electrodomésticos, armarios empotrados en los dormitorios y suelo radiante. El plazo de ejecución estimado es de unos 23 meses y que las viviendas se entreguen en el último trimestre de 2024. El conjunto residencial estará en junto al Puente Frank Gehry que conecta con el barrio de Deusto y el Puente de Euskalduna y muy cerca del Parque de Doña Casilda o a la Gran Vía.

Vivienda de la nueva promoción Neinor Homes. / Neinor

Conexión del tranvía con la Punta Sur de la isla

Estas nuevas viviendas dan un empujón a la movilidad sostenible. La urbanización de la Isla contempla la extensión de la red del tranvía de Bilbao a lo largo de Zorrozaurre, creando una columna vertebral que la recorrerá longitudinalmente.  En total, supondrá un nuevo trazado de 2,5 kilómetros con 5 paradas en la Isla, lo que facilitará más aún la conexión con las zonas más reconocidas de la ciudad, Indautxu y Abando. La Punta Sur de Zorrozaurre servirá de acceso al tranvía y está prevista la construcción de un nuevo puente que conectará la isla con el trazado del tranvía ya existente.

Por otro lado, la carretera existente en la Ribera se transformará en una calle de prioridad peatonal y una red de carriles para bicicletas favorecerá un objetivo de movilidad sostenible. Así, estas nuevas viviendas y esta zona estará comunicada por transporte tanto público como privado, además de contar con otros servicios como los educativos, sanitarios, culturales y deportivos.