El modelo eléctrico de Aresar se abre paso en Madrid, Zaragoza o Santander

La compañía Aresar, instalada en el AIC de Boroa, sigue dando pasos hacia la meta de comercializar un vehículo eléctrico para trayectos urbanos. Será en enero de 2024 cuando la firma vizcaína pueda tener listo para sacar al mercado un vehículo propio completo, el J14, pero como antesala de ese hito ha creado un modelo embrionario colocando su motor (powertrain) a un chasis ya existente que se podrá ver circular próximamente en ciudades como Santander, Logroño, Zaragoza o Madrid.

Desde la compañía de Amorebieta se indica que ya hay pedidos en firme de algunas de las empresas de limpieza, mantenimiento de zonas verdes o recogida de basuras de estas grandes capitales y, en ese sentido, el R14 abre el camino. El proyecto está enfocado precisamente a la cobertura de trayectos de corta distancia en núcleos urbanos, además de para repartos de última milla (el tramo final que realiza la mercancía antes de llegar al cliente), por lo que tener presencia ya en estas ciudades es fundamental.

Aresar tiene ahora mismo dos grandes frentes abiertos. Por un lado está el aspecto tecnológico, en el que se viene trabajando desde hace años primero para el desarrollo de ese tren de potencia o powertrain y, a partir de aquí, para poder montar un vehículo completo de estas características en sus instalaciones del AIC a partir, en algunos casos, de materiales reciclados. Tras una primera presentación de ese vehículo completo en septiembre la compañía sigue adelante con el desarrollo del prototipo, que estará listo en torno a mayo del año que viene, para empezar la comercialización unos meses después.

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Fábrica de baterías en Extremadura

Pero más allá de dar con las teclas en el aspecto tecnológico la compañía está inmersa en un proceso de captación de capital necesario para poder seguir creciendo. Tras dar el salto al AIC de Boroa en abril la idea es seguir ampliando plantilla sobre todo teniendo en cuenta que las sensaciones que transmite el mercado son buenas, para lo que hacen falta inversores.

Además Aresar ha encontrado una puerta de acceso a los fondos europeos entrando junto a otra docena de empresas en el desarrollo de una fábrica de baterías en Extremadura, un proyecto que puede considerarse primo hermano de Basquevolt. Se trata del proyecto Venergy+ que lideran la china Envision y Acciona y que cuenta con Aresar o Teknia en su nómina de socios. Con una inversión en primera fase de 1.000 millones de euros la planta que se ubicará en Navalmoral de la Mata, en Cáceres, aspira a generar 3.000 puestos de trabajo. Aresar hace valer así su experiencia en el desarrollo de tecnología para la movilidad sostenible siendo parte de uno de los proyectos más ambiciosos en España en este campo.

El tercer proyecto de baterías en España además de Basquevolt y Venergy+ es el que lideran Volkswagen y Seat en Sagunto y sobre el que esta misma semana se ha anunciado que podría quedar en suspenso si los fondos europeos no alcanzan las expectativas del fabricante alemán.