Los contratos indefinidos crecen en Euskadi un 33% más lento que en el resto de España

En un momento en el que la aplicación de la reforma laboral está disparando la contratación indefinida, Euskadi está perdiendo fuelle frente al resto de España en contratación indefinida. Así lo asegura un informe elaborado por el servicio de estudios de UGT al que ha tenido acceso este periódico. Según el cuadro de evolución sociolaboral que elaboran los técnicos de la central que en Euskadi preside Raúl Arza, el peso de la contratación indefinida, pese a estar recuperando 'punch', lo está haciendo a un ritmo mucho más lento que la media nacional. En el conjunto de España, el porcentaje de contratos indefinidos sobre el total de relaciones laborales suponía en septiembre un 46,7%, mientras que en Euskadi esa tasa es de apenas un 31,2%, un tercio menos que la media nacional.

Así lo sostiene el estudio de la centeal que lidera Pepe Álvarez -este jueves de visita a Euskadi en Vitoria, donde va a mantener una reunión con los representantes de la central en Mercedes-, que también sostiene que este es el año de la última década en el que más poder adquisitivo se ha perdido a pesar de que Euskadi es la comunidad autónoma en la que más han subido los salarios pactados en convenio, con un 5% de media. Con la inflación en el 8,7% como media anual, el poder adquisitivo de los trabajadores ha decaído en un 3,4%.

Desde la central, Raúl Arza matiza que el dato de personas -que no el de contratos- con contrato indefinido sigue siendo "bueno" y que el aumento más lento que la media nacional, entienden en la central, se debe a que Euskadi "ya tenía muchos contratados indefinidamente" antes de la aplicación de la reforma laboral.

Sin embargo, los datos del INE también confirmna una pérdida de punch en la contratación indefinida si se mira al espejo nacional y en términos de personas y no contratos. Los últimos datos de la estadística nacional, del segundo trimestre, constataban ya que el porcentaje de personas con contrato indefinido en Euskadi es de un 77,3%, ya en cuatro décimas inferior a la media nacional que tradicionalmente había superado la comunidad autónoma. Ahora, sin embargo, las tornas han cambiado en una tesitura que, apuntan fuentes expertas del mercado laboral consultadas por este periódico, tienen que ver con la propia estructura de la economía vasca, más industrial frente a otras regiones donde el sector servicios o el primario tienen más peso y que ahora han visto cómo tenían "más margen de mejora". Aun así, explican que "hay trabajo por hacer" ahora que la media nacional es más alta que la autonómica.

Trabajadora de Gamesa en una fábrica de la división eléctrica de la compañía / Siemens Gamesa

Peor para ellas y para los parados de larga duración

A esta situación, además, se le junta el factor de la brecha de género. Una brecha salarial, que en Euskadi, según datos de esta misma central, se sitúa en un 17,9% en términos salariales, pero que también es brecha en las condiciones del contrato: mientras solo el 19% de los vascos ocupados tienen un contrato temporal, entre ellas son el 26,5% las que no tienen un contrato indefinido.

Otra de las cifras que arroja el estudio de UGT es que los parados que no están consiguiendo salir del desempleo en una comunidad con el paro ya en el entorno del 8% son precisamente los de larga duración: aquellos que no tenían trabajo antes de la pandemia. Los parados de hace más de dos años son el único grupo entre los desempleados que están viendo cómo su peso entre las personas en las listas de Lanbide crece en vez de disminuir.