Si hace unos meses el planteamiento era sobre si impulsar en Euskadi una jornada laboral de cuatro días, ahora es sobre el número de horas de teletrabajo en la Administración Pública vasca. Y es que el Consejo de Gobierno vasco ha aprobado este martes un nuevo decreto que contempla con carácter general dos jornadas completas de esta modalidad laboral a la semana, ampliables dependiendo el sector, además de voluntarias y reversibles.

Con esta nueva normativa, que amplia la regulación en vigor desde 2012 -que permite que en estos momentos 900 empleados públicos teletrabajen en la comunidad autónoma-, se abre la posibilidad de acceder a esta modalidad a un mayor número de empleados públicos de la administración general, de los organismos autónomos, y de sectores públicos como Educación, Salud, Seguridad y Justicia, así como de los entes públicos de derecho privado, sociedades públicas y fundaciones y consorcios del sector público.

Incrementarlas

De esta manera, contempla dos jornadas completas de teletrabajo a la semana y permite incrementarlas en función de las peculiaridades de cada puesto de trabajo, cuestión que se desarrollará posteriormente en la mesa de negociación colectiva de cada ámbito sectorial, porque en cada sector se creará una comisión de seguimiento del teletrabajo para el control y supervisión de esta modalidad laboral.



Esta modalidad tendrá carácter voluntario y reversible, aunque los puestos de trabajo cuya prestación efectiva solo quede garantizada con presencia física del empleado en el centro de trabajo no podrán ser ejercidos mediante esta modalidad.

Lo cierto es que este es un paso de gigante para la implantación del teletrabajo entre los funcionarios del Gobierno vasco. Algo que los sindicatos de la función pública venían demandando desde hace años. 

Una de las cuestiones más polémicas de este medida, o al menos así se ha criticado con dureza en algunas redes sociales, es que llegue justo en plena campaña electoral del 23-J