La fundición Belako presenta quiebra sin activos

Inyectados Belako, de Mungia, va directamente al desguace. El Juzgado Mercantil número 3 de Bilbao ha declarado el concurso de acreedores “sin masa activa” y está a la espera que alguno de los acreedores solicite el nombramiento de administrador concursal.

Belako es una fundición de metales no férricos. Se fundó en 1992 para la subcontratación de piezas, impulsada por Enrique Basáñez Blanco y Pedro Montero Pinto, que provenían de la industria de la forja.

El primero cesó en 2005 y desde entonces ha estado al frente del negocio Pedro Montero. La pasada primavera vendió el 100% del capital a Pedro Enrique Rodríguez Arceda. Las instalaciones industriales se encuentran en calle Aritz Bidea, de Mungia.

Inyectados Belako afirma en la memoria elevada al juzgado que su situación de insolvencia es definitiva, pues carece de liquidez para atender las obligaciones vencidas y tampoco quedan en el balance bienes muebles o inmuebles.

Siniestro

El origen de esta bancarrota se halla en un percance ocurrido en agosto último en las instalaciones de Belako. El único horno reventó y hubo que pararlo, con el consiguiente cese de todas las operaciones. La reparación resultó inviable porque entrañaba un coste de 250.000 euros.

Belako se ha dedicado desde entonces a vender la chatarra que todavía quedaba en los almacenes. Con los recursos obtenidos, se han liquidado los salarios de la plantilla y los honorarios del abogado que ha presentado el fallido.