Las motocicletas eléctricas Ox Riders están tocadas y hundidas, cuatro años después de su lanzamiento. El Juzgado Mercantil número 1 de Bilbao ha declarado el concurso de acreedores voluntario de la compañía Ox Riders Electric. El balance presentado arroja un activo de cero euros mientras que las deudas suben a 750.000. Con semejantes magnitudes, queda claro que los acreedores no cobrarán un céntimo.
Ox Riders se puso en marcha en 2019, con tres promotores iniciales, a saber, Adrián González, Valeria Valverde y Martín Fernández.
Las motos de Ox Riders combinan un diseño retro y, a la vez, futurista. Asimismo encierran un alto nivel de desarrollo tecnológico e incorporan los últimos adelantos en materia de seguridad pasiva. Además, los compradores pueden personalizarla y extraer la batería para cargarla en cualquier lugar.
Financiación externa
Esta startup vasca tiene su domicilio en calle Uribitarte, de Bilbao. Desde su lanzamiento cuatro años atrás, ha acometido dos rondas de financiación, en las que entraron recursos financieros aportados por socios externos.
Según informaciones del Registro Mercantil, dirige la compañía Adrián González Carreras. El capital social pertenece íntegramente a la sociedad laboral Abora World. Los gestores de esta última son Pablo Gaztelu Caballero, presidente; Zakaryan Astghik y Martín Fernández de Labastida, vocales.