Según ISDIN, pese a que, presentando sus informes y estudios de laboratorio, ha recibido el respaldo y la validación de la Agencia Española del Medicamento (Aemps) a todos sus productos, “la OCU mantiene que sus informes están basados en resultados científicos y se niega a rectificar”.
“En el último estudio de la OCU sobre protectores publicado en marzo determinó que el producto de ISDIN, Fusion Water Magic SPF 50 no cumplía con el factor de protección del etiquetado. Apenas unas semanas después, tras recibir informes de laboratorio de la compañía, la Aemps, como ya ha hecho en más de una ocasión, rectificó a la OCU asegurando en un comunicado que ‘el supuesto incumplimiento afectaba al FP-UVA. ISDIN ha facilitado dos ensayos, uno realizado con el método oficial in vivo (UNE EN ISO 24442), y otro con el método oficial in vitro (UNE EN ISO 24443). En ambos casos el resultado obtenido apoya la reivindicación de la etiqueta’”, indica ISDIN.
Después de requerir una rectificación a la OCU, ISDIN también ha decidido enviar una carta a 50.000 farmaceúticos y dermatólogos explicando que la organización de consumidores, “pese a toda la documentación científica que le ha aportado la compañía y la aclaración de la Aemps”, se ha “negado a una rectificación pública”
En la comunicación a las farmacias ISDIN explica el motivo de la demanda contra la OCU: “Queremos informarte de que acabamos de presentar una demanda judicial contra esta empresa privada por haber confeccionado y difundido un estudio, sesgado, carente de cualquier metodología objetiva y basado en estudios irregulares y criterios arbitrarios".
En la misma carta, asegura que el informe sobre fotoprotección de la OCU está siendo utilizado en "un acoso a la marca con continuos ataques denigratorios vertidos por algunos 'influencers' y/o colaboradores de conocidas marcas competidoras".
La empresa señala que “el éxito” de sus productos y en concreto del Fusion Water Magic SPF 50 a nivel mundial “lo ha llevado a estar siempre en el foco de la OCU y de algunas marcas”, dejando “entrever intereses de terceros en dañar la reputación de la compañía”.
“Ya en 2019, los principales colegios de farmaceúticos expresaron públicamente su apoyo a la compañía calificando los estudios de la OCU como poco rigurosos y poco creíbles cuya finalidad era ”hacer ruido mediático con intereses desconocidos”, sostiene ISDIN.