La crisis de los semiconductores, que estalló a finales de 2020, dejó en evidencia la dependencia de algunos países europeos hacia los productos chinos. Cuatro años después, son muchas las zonas del continente las que han buscado alternativas para minimizar esta dependencia que se acentuó en ese momento.
Es el caso de Euskadi, que a través del proyecto de investigación colaborativo ‘SoC4CRIS’, trabaja para diseñar semiconductores de aplicación para la industria vasca orientada a los sectores de la energía, transporte, automoción, máquina herramienta, médico y aeroespacial...
Un proyecto financiado por el programa de ayudas a la investigación colaborativa Elkartek de SPRI y liderado por el Equipo de Investigación en Electrónica Aplicada de la UPV/EHU, en colaboración con CEIT, Tekniker, Ikerlan, IKOR y el Clúster GAIA.
Los objetivos principales de esta iniciativa son, por una parte, ganar autonomía en el diseño y fabricación de semiconductores, tratando de mitigar una nueva situación de crisis.
Por otra parte, se pretende sentar las bases para poder generar nueva actividad económica en el campo de los semiconductores para estos sectores, habilitando a medio plazo la capacidad de poner en el mercado nuevos circuitos integrados que incorporen los elementos de valor identificados y desarrollados por el tejido industrial y de I+D+i de Euskadi.
Así, el proyecto va más allá y es que con este es la primera vez en Euskadi que se diseña un System-on-Chip con una función integrada y completa que, basado en la arquitectura de CPU RISC-V, incorpora en un mismo dispositivo de silicio los componentes electrónicos, recursos de memoria y periféricos de comunicación necesarios para su funcionamiento. Este diseño va a permitir la fabricación de un prototipo que se utilizará para la experimentación mediante pruebas y test utilizando metodologías estandarizadas.