La integración de Cajasur amenaza la influencia de ELA y LAB en Kutxabank

Entre las consecuencias que tendrá en la plantilla del grupo Kutxabank la integración total de Cajasur está la recomposición de los sistemas de representación sindical, aunque de cara a la negociación en curso se mantendrá la composición actual de la mesa, según explican fuentes sindicales a Crónica Vasca.

En ese foro tiene mayoría ELA por delante de CCOO, Pixkanaka y LAB. El cambio se producirá una vez se celebren las próximas elecciones, que tendrán lugar con alguna diferencia de fechas por centros pero, más o menos, hacia finales del año que viene.

Será entonces cuando se traslade a los órganos de representación sindical la nueva configuración de la unión Kutxabank-Cajasur, que a nivel geográfico tiene una consecuencia clara: el banco vasco va a pasar a tener prácticamente el mismo número de trabajadores en Euskadi que fuera de este territorio.

Eso se debe a que Cajasur, siempre contando con ese ERE en marcha para más de 200 salidas que se irán ejecutando los próximos años, aporta 1.600 trabajadores a un grupo (la cifra será más baja cuando se termine de aplicar el ERE) que contaría en total con unos 5.000.

Pero es que, según la última memoria del banco, a cierre de 2023 de los 3.400 empleados de la entidad sin contar Cajasur, un millar estaban en oficinas de fuera de Euskadi. Hay que recordar que la entidad de Antón Arriola viene haciendo una fuerte apuesta por crecer en Madrid, donde recientemente inauguraba nuevas oficinas, con lo que probablemente el número sea incluso mayor a estas alturas.

Movilización por la huelga en Kutxabank hace unos años

Suma Asprobank pero también CCOO

Con esos datos, en todo caso, la entrada de la plantilla de Cajasur situaría en 2.600 el número de trabajadores fuera de Euskadi, incluso algo más de los que quedan en las oficinas vascas.

Por tanto, lo lógico es que en los siguientes comicios cobren un mayor peso a nivel sindical aquellas organizaciones que tenían representación en Cajasur, que son ahora mismo el mayoritario Asprobank, que es el que ha impulsado el acuerdo de homologación de condiciones que hace posible la integración, CCOO y ALE.

Antón Arriola en la presentación de la nueva sede de Kutxabank en Madrid con el alcalde José Luis Martínez-Almeida

La suma de la plantilla de Cajasur engordará la capacidad de influencia de la central cordobesa, aunque también hará lo propio en menor medida con CCOO.

Los que saldrían peor parados serían ELA y LAB, con mucho peso en casi todas las administraciones y sectores en Euskadi pero que en el banco vasco han ido perdiendo posiciones, así como el independiente Pixkanaka Kaskari.

No deja de ser el reflejo de cómo la propia entidad ha tenido que 'salir fuera' para poder seguir siendo competitiva dentro de un sector financiero en el que es cada vez más relevante tanto el tamaño como la implantación en territorios clave a nivel de negocio como es el caso de Madrid.