Sidenor ha anunciado que ha logrado utilizar hidrógeno con éxito en su planta de Basauri en el calentamiento de cucharas, los elementos que se utilizan para transportar el acero fundido dentro de la planta.
La compañía de José Jainaga logra así cumplir con un "hito" en su hoja de ruta de descabonización avanzada el pasado año a la espera de nuevos avances tecnológicos en el negocio del hidrógeno para explorar nuevos usos.
En estos momentos el hidrógeno sigue siendo más promesa que realidad, aunque sectores como el siderúrgico siguen de cerca las evoluciones a la espera de que su consumo pueda ser rentable, sobre todo como fuente energética en sustitución del gas en procesos que son muy difíciles de electrificar.
"El hidrógeno necesita tiempo para ofrecer precios competitivos", resumía al respecto en una entrevista reciente con este medio Asier San Millán, del clúster Siderex.
José Antonio Jainaga.
Ciclo completo
Sidenor ha informado de que ha llevado a cabo de forma satisfactoria ya las primeras pruebas de combustión de hidrógeno verde en el proceso de calentamiento de cucharas, un paso clave en la producción de productos de acero.
Así, en su acería principal, en Basauri, ha sustituido el quemador convencional a gas por uno de oxicombustión con hidrógeno. De esta manera ha realizado un ciclo de calentamiento de cuchara completo consiguiendo alcanzar las temperaturas de trabajo necesarias, ha explicado el grupo vasco.
Es una prueba similar a la que ensayó de forma pionera hace dos años ArcelorMittal en Sestao en un proyecto de la mano de la ingeniería vasca Sarralle.
La introducción del hidrógeno en la fase 'normal' de producción de una gran planta de este tipo, más allá de pruebas puntuales, sigue lejos por los elevados costes asociados al hidrógeno y sobre todo a su transporte.
