¿Saben ustedes que tienen en común el estadio del Everton en Liverpool, el nuevo Camp Nou de Barcelona, el tren urbano de Chicago, la Ciudad de las Artes de Valencia, el primer teleférico sostenible del mundo, un satélite que orbita alrededor de la tierra, cualquiera de los aviones que cada 2 segundos despegan o aterrizan en el mundo o las lentillas que usan cuando tienen cataratas los perros de Nueva York? Que todos tienen elementos o productos fabricados en Álava.
Estoy seguro que a la gran mayoría de los lectores de esta columna les habrá sorprendido mucho estos datos que han podido conocer los ciudadanos alaveses gracias al primer Made in Araba Day, un evento organizado por la Diputación Foral de Álava con el objetivo de acercar a la ciudadanía la realidad y el enorme potencial del tejido productivo de un territorio que tiene el PIB industrial más alto de España, un 33%.
Durante muchos años, demasiados diría yo, las empresas en general, y muy en particular las vascas, han vivido un poco alejadas de la sociedad y el territorio en el que se asientan.
Necesitamos que cada vez más firmas abran sus puertas y compartan con el resto de la población todos sus avance
Su foco se ha centrado siempre en atender a sus tres principales grupos de interés: clientes, personas trabajadoras e inversores. Sin embargo, esta realidad está cambiando de manera radical por factores como la progresiva implantación de las medidas de RSC o los criterios ESG, como se dice ahora, y, sobre todo, por la imperiosa necesidad de captar nuevo talento que les permita seguir creciendo.
Este acercamiento a la sociedad es tan necesario como oportuno, hay que romper ese desconocimiento general del enorme valor que aporta a nuestro país las empresas ubicadas en él y, sobre todo, visualizar su importancia para nuestro desarrollo futuro. También necesitamos que cada vez más firmas abran sus puertas y compartan con el resto de la población todos sus avances. Lo que se conoce se valora y lo que se valora tiene más posibilidades de perdurar en el tiempo.
En mi humilde opinión, el primer Made in Araba Day ha sido todo un acierto porque ha puesto el foco, como principal destinatario, en la ciudadanía y ha llevado la realidad de las empresas alavesas a la calle de una manera directa, fácil de entender y con el apoyo de sus principales protagonistas: los hombres y mujeres que forman parte de este potente tejido empresarial.
Es de admirar la capacidad de todas estas firmas para generar negocio y riqueza adaptándose a las condiciones de un mercado internacional
Este mismo formato podría replicarse perfectamente en los otros 2 territorios vascos porque sé fehacientemente que hay ejemplos suficientes de liderazgo e innovación en muchos sectores y en compañías de diferente tamaño, porque en esto de la excelencia empresarial el tamaño no importa.
Lo hemos comprobado este pasado sábado en las calles de Vitoria-Gasteiz, donde hemos podido ver a multinacionales como Mercedes Benz o Michelin compartir espacio con la primera cooperativa mundial de científicos, I+Med, ubicada en el Parque Tecnológico de Álava, con firmas como AB laboratorios, que no pasa de 34 empleados, una pequeña destilería como Basque Moonshiners, que elabora el whisky que ha sido reconocido como el mejor destilado añejo del mundo con patata alavesa, o start ups que están comenzado a comercializar sus productos o servicios, como el caso de los cargadores para vehículos eléctricos de Veltium.
Es de admirar la capacidad de todas estas firmas para generar negocio y riqueza adaptándose diariamente a las condiciones de un mercado internacional cada vez más exigente y en plena transformación ecológica y energética del planeta. Todas tienen en la atracción y retención de talento uno de sus principales retos durante los próximos años y creo que deben aprender a venderse como espacios propicios para el desarrollo personal y profesional de una nueva generación de personas que tiene en consideración diferentes variables que van mucho más allá del salario.
Ya va siendo hora de que presumamos todos de nuestras empresas, tenemos al lado algunas que son líderes y referentes mundiales en su sector
Precisamente, una de las actividades desarrolladas en el marco del Made in Araba Day se centró en conocer de primera mano las motivaciones de 8 profesionales de diferentes países que habían elegido empresas ubicadas en Álava para desarrollar su carrera. Sorprende comprobar como todos valoraban de una manera excepcional el modo y la calidad de vida del territorio y el carácter y cercanía de las personas con las que trabajaban, en definitiva, el clima laboral de sus empresas. Es muy interesante comprobar como desde fuera se valora mucho más nuestra capacidad de trabajo e innovación que nosotros mismos.
En Euskadi sacamos pecho por muchas cosas, nuestros equipos de fútbol o baloncesto, nuestro paisaje, nuestras fiestas, nuestra gastronomía, etc. Ya va siendo hora de que presumamos todos de nuestras empresas, tenemos al lado algunas que son líderes y referentes mundiales en su sector, que llevan la marca Euskadi a los 5 continentes y que generan una parte muy importante de la riqueza de nuestro territorio.
Son empresas que cada día deben adaptarse a las nuevas necesidades del mercado, a los nuevos reglamentos europeos, ser más sostenibles y digitales para seguir siendo competitivas. Acercar su realidad a toda la ciudadanía va a ayudar a tender puentes y a potenciar su arraigo y reconocimiento en el territorio. Así que bienvenidas iniciativas como esta de la Diputación Foral de Álava y esperamos que cada vez sean más las compañías que abran sus puertas y estrechen los lazos con la sociedad donde desarrollan su trabajo. No tengan ninguna duda de que el roce hace el cariño.