El consejero de Seguridad del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha presentado este lunes en el Parlamento la memoria anual de delitos cometidos en Euskadi en 2020, unos datos "absolutamente marcados por la pandemia", según ha señalado Erkoreka, que detectan una bajada global en la tasa de delincuencia de en torno a 10 puntos -del 55,03% en 2019 al 45,05% en 2020- en los municipios vascos con más de 15.000 habitantes. La memoria de 2020, marcada por las restricciones de la movilidad, reflejan a su vez una alteración en "las conductas delictivas", apreciándose, según ha desvelado el consejero, un incremento en el número de estafas tras incrementarse la compraventa a través de internet.
Los datos presentados por Erkoreka proceden de los registros de la Ertzaintza y de las Policías locales de aquellos municipios vascos de más de 15.000 habitantes. El consejero ha señalado que las conclusiones de su análisis solo pueden entenderse bajo la influencia de la pandemia. Las restricciones de movilidad han "alterado las conductas delictivas", ha reflexionado Erkoreka, que ha desvelado que los datos globales desvelan una reducción del 17,5% tras bajar los delitos y las faltas de 121.485 en 2019 a 100.041 en 2020. El consejero ha indicado que tras la bajada generalizada en su departamento ha llamado "la atención" que en 11 de los 32 municipios vascos más poblados, se haya producido un incremento "contra toda la lógica". En este sentido, ha indicado que esta "fuerte" subida en 8 de los 11 municipios se debió al número de "denuncias por estafa", debido al incremento en las transacciones a través de internet durante la pandemia.
Gráfico
En 2020, la tasa de delincuencia en Euskadi por mil habitantes se situó en el 45,05%, una caída del 18% respecto al año anterior. Por territorios históricos y capitales, la mayor caída se produjo en Bizkaia, con un 21% menos que en 2019, seguida de Gipuzkoa, con un 15% menos, y Álava con un 14,5% menos. Estos fuertes descensos, así como la variación de la tipología delictiva respecto al año anterior, se deben, principalmente, a la situación generada por la pandemia y las restricciones de horario, movilidad o la distancia, derivadas del estado de alarma y de la normativa sanitaria para frenar la expansión de la Covid-19.
De la misma manera, el grueso de las tipologías de infracciones penales más frecuentes en Euskadi, tanto contra las personas como contra el patrimonio, han disminuido durante la pandemia. Sobre todo, los delitos contra el patrimonio (robos con fuerza en vivienda, robos con violencia o intimidación, hurtos o sustracción en vehículos, entre otros) que han bajado un 23% en Euskadi (26,44% en Álava, 25,26% en Bizkaia, y 16,86% en Gipuzkoa).
Fruto de las restricciones de la normativa para frenar la expansión de la covid-19, destaca el aumento de dos tipologías delictivas en Euskadi. Primero, los delitos informáticos: hubo 16.935, un 18,3% más que el año pasado. En especial destaca el crecimiento del delito de estafa a través de internet que, en 2020, tuvo 15.728 denuncias recogidas por la Ertzaintza, un 18,2% más que en 2019. Segundo, los delitos asociables a la situación pandémica: hubo 1.453 infracciones penales. Se han, prácticamente, duplicado (+92,7%) los delitos de atentado contra la autoridad, resistencia, desobediencia o desórdenes públicos, entre otros. Son todas las tipologías asociadas al incumplimiento de la normativa derivada de las limitaciones del estado de alarma y de las restricciones sanitarias.
Violencia contra las mujeres
En 2020 dos mujeres fueron asesinadas en Euskadi fruto de la violencia contra las mujeres: Miren Goizargi, y su hija Paola Méndez, ambas vecinas del barrio de San Fuentes de Abanto Zierbena. No obstante, el conjunto de delitos machistas disminuyó en Euskadi: hubo 5.276 denuncias, un 4,4% menos que el año anterior. Disminuye en todas sus formas: violencia de género ejercida por la pareja o expareja, violencia dentro del hogar por otros familiares hombres y contra la libertad sexual. Por su parte, los delitos de maltrato dentro del ámbito del hogar que no tienen la componente machista se han mantenido prácticamente igual en 2020: 4.356 denuncias registradas por la Ertzaintza.
Finalmente, han crecido los denominados 'delitos de odio', categoría en la que se incluyen las infracciones penales relacionadas con el racismo, xenofobia, antisemitismo, sexo, género, orientación política o ideológica, edad o diversidad funcional. En 2020 hubo 241 delitos, un crecimiento del 130% respecto al año anterior. El Gobierno vasco atribuye esta subida a que la sensibilización y conocimiento social van en aumento respecto a esta tipología de infracciones y, por tanto, cada vez se denuncian más.